Ya hemos visto en anteriores ocasiones como la madre naturaleza puede ser el peor enemigo contra el que combatir y el ejemplo más reciente lo tenemos con el barco de carga que entregó hace tan solo unos días más de una docena de coches completamente congelados. Esto ocurrió no muy lejos de la costa de Estados Unidos, un país que, lamentablemente, sabe lo que se siente al luchar contra las adversidades atmosféricas, especialmente unos tornados que arrasan todo aquello que encuentran a su paso.
Una imagen muy triste
Unos de los damnificados de la serie de tornados que tuvo lugar a principios de este mes en territorio norteamericano son más de un centenar de Chevrolet Corvette C8, listos para ser entregados a sus propietarios. No solo ellos, sino que también la factoría de General Motors en Bowling Green, Kentucky, se ha visto afectada además del famoso Museo Corvette. La fuerza destructiva de la naturaleza dejó más de 120 ejemplares seriamente dañados, de manera que el fabricante no ha tenido más remedio que mandarlos directamente al desguace.
Ahora, gracias al canal de YouTube svrweather, podemos echar un vistazo al recinto en el que aguardan estacionados los Corvette, una triste imagen que nos deja a todas estas unidades del deportivo estadounidense esperando a que les llegue su hora final. El vídeo, grabado a vista de dron, nos permite contemplar desde diferentes ángulos los terribles efectos de un tornado que también provocó un incendio en la citada factoría, el cual destruyó tanto el techo del edificio como una de las entradas para los empleados.
Afortunadamente, todos los trabajadores lograron salir sanos y salvos, aunque no pudimos decir lo mismo de la fábrica. La última parte del documento muestra algunas reparaciones en curso para Bowling Green. Parece que el fabricante de automóviles ha comenzado a trabajar sobre los techos, y se espera que la limpieza y los trabajos de reparación continúen hasta 2022.
Producción detenida
Así mismo, General Motors se ha visto obligada a detener la producción del Chevrolet Corvette, tal y como aseguraba un portavoz de la planta a CorvetteBlogger: “Mantener un entorno de trabajo seguro para los empleados de la planta es nuestra principal prioridad. Por lo tanto, cancelaremos la producción en el primer y segundo turno la semana del 13 de diciembre, ya que nuestros equipos capacitados trabajan para que las herramientas, el equipo y el espacio de la instalación alcancen los estándares”.
Una pena que todo ese centenar de automóviles tengan un final tan amargo como este, unas máquinas cuyo motor V8 de aspiración natural y 6.2 litros no volverá a rugir nunca más. No sabemos cuanto tendrán que esperar los propietarios dadas las circunstancias para poder disfrutar de sus nuevos ejemplares de la generación C8.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
