- El nuevo EQS es el gran buque insignia de la familia eléctrica de Mercedes
- No es un Clase S electrificado, resulta mucho más aerodinámico y emocional
- A la venta desde 117.125 euros promete una autonomía de hasta 741 kilómetros
La familia de coches eléctricos de Mercedes, reconocible gracias al apellido EQ, sigue creciendo y el último miembro en sumarse ha sido, precisamente, el buque insignia de la misma. Por supuesto, hablamos del lujoso y sofisticado Mercedes EQS, una gran berlina con potencia y autonomía elevadas, que ya está a la venta en nuestro país y que ya hemos podido probar en Car and Driver.
Recordemos que la firma de la estrella se comprometió en su día a lanzar diez modelos eléctricos hasta 2022 y tiene pinta de que va a cumplir su palabra a pesar de los retrasos surgidos a causa del Covid-19. Las denominaciones de estos modos se corresponden con las habituales 'Clase' de la marca, pero añaden variantes SUV en muchos de ellos. Así tenemos unas gamas EQA, EQB, EQC, EQE y EQS bien diferenciadas, además de otros modelos con este sello como el gran monovolumen EQV o como el característico todoterreno EQG.
Características del Mercedes EQS
Mercedes describe a este modelo como su "primera berlina de lujo con propulsión eléctrica por batería". y llega dispuesto a plantar cara al Tesla Model S. De hecho tras algunas apariciones discretas en ciudad o en parajes nevados, el equipo de desarrollo no dudó en trasladarse hace unos meses a Nürburgring-Nordschleife para afinar su rendimiento y de paso, compararlo tanto con el del citado Tesla, como con el Porsche Taycan.
A nivel de diseño se asemeja más al Taycan pero a nivel de comportamiento y prestaciones, más al Tesla. El EQS es una berlina muy atlética, baja y aerodinámica, un con un diseño elegante y estilo coupé con líneas suaves, incluyendo una redondeada zaga. Se nota que su gran referente a nivel estético no es otro que el futurista concept Vision EQS, que vimos en septiembre de 2019. Pero más allá de la estética este diseño sirve para convertir al EQS, según Mercedes, en el coche de serie más aerodinámico del mundo, con una cifra récord de coeficiente de resistencia cx de 0,20.
Un interior venido del futuro
Todo esto se suma a los grandes avances a nivel de tecnología y conectividad en su interior, con el ya mencionando MBUX Hyperscreen que te descubrimos aquí, y que dejan claro una vez más que esta especie de versión eléctrica del modelo más lujoso de Mercedes (aunque ya queda claro que hay importantes diferencias entre uno y otro) será el nuevo y más importante escaparate a nivel tecnológico de toda la marca. Así, su salpicadero estará liderado por tres grandes pantallas táctiles unidas en un mismo vidrio –141 centímetros de anchura–, con un sistema de infoentretenimiento que utiliza una CPU de ocho núcleos y presume de 24 GB de memoria RAM.
A este núcleo central del ecosistema del EQS se añade también otros extras tecnológicos como actualizaciones OTA para mantener siempre a la última nuestro coche, así como un sistema de infoentretenimiento adicional conocido como MBUX High-End Plus destinado a las plazas traseras, así como por supuesto otros añadidos a que dejan claro que también estamos ante un coche con el lujo habitual de Mercedes, con acabados de máxima calidad
Mercedes EQS - fotos
Más de 700 km de autonomía
Todo esto convierte al EQS en el modelo más sofisticado de Mercedes, pero tampoco hay que olvidar el origen de todo. Su sistema motriz 100% eléctrico, nacido a partir de una nueva plataforma modular distinta, específica para vehículos eléctricos y conocida como MEA que lo diferencia aún más de su hermano el Clase S de combustión y otras berlinas de tracción trasera, que emplean la MRA que no cuenta con tanto espacio para las baterías.
Este cambio es realmente importante para lograr una autonomía eléctrica de 770 km WLTP, gracias a una batería avanzada de 107,8 kWh que nace bajo la colaboración de Mercedes con la compañía CATL y que prescindirá de los habituales módulos para integrar las celdas directamente. Además se podrá cargar en puntos de carga rápida a una velocidad de hasta 200 kW, obteniendo en unos 15 minutos unos 300 km adicionales.
El EQS ofrece tres modos de carga para la batería: Estándar, Hogar y Trabajo, con tiempos de recarga que oscilan mucho en función del tipo de cargador que usemos. En un Wallbox de 22 kW requiere de 5 horas y en uno de 7,4 kW 15 horas, mientras que en un punto de carga rápida convencional pasa del 10 al 80% de la carga en 31 minutos. Su sistema permite cargas de hasta 200 kW por lo que teóricamente, podría obtener 300 kilómetros de autonomía en solo 15 minutos.
La gama la componen dos motorizaciones denominadas 450+ y 580 4 Matic, a las que hay que añadir la versión de este modelo firmada por Mercedes-AMG, la EQS AMG 53 4 Matic, también con mecánica eléctrica pero con un enfoque más deportivo. El primero entrega 333 caballos de potencia y 568 Nm de par máximo, el segundo 523 cV y 855 Nm de par. Del AMG de momento, sabemos que tiene 639 CV de potencia, pero desconocemos su par motor. La batería, en todos los casos, viaja en el piso del vehículo y gracias a sus 12 módulos ofrece 107,8 kWh de capacidad.
Ficha técnica del Mercedes EQS
- Longitud: 5,21 metros
- Anchura: 1,93 metros
- Altura: 1,51 metros
- Batalla: 3,21 metros
- Peso: 2.480 kilos
- Maletero: 610/1.770 litros
- Motorizaciones: 450+ (333 CV) / 580 4 Matic (523 CV) / 53 AMG 4 Matic (639 CV)
- Transmisión: Trasera, 1 velocidad / 4x4, 1 velocidad
- Batería: 107,8 kWh (iones de litio)
- Precios: Entre 117.125 y 146.625 euros
Test de conducción del Mercedes EQS
Un esbelto Mercedes EQS 580 4 Matic nos recibió, majestuoso, frente al hotel Ritz, en pleno centro de Madrid. En vivo, los más de cinco metros de longitud que presenta este modelo se dejan notar mucho más que en las fotos, hasta el punto que por sus formas y proporciones, recuerda mucho más a un Porsche Panamera que al Taycan, el eléctrico de esta marca. Somos conscientes desde el primer momento de que estamos ante una gran berlina de representación, solo que con un aire tan aerodinámico y futurista como nunca imaginamos en un Mercedes.
Al acceder al interior, la experiencia gana enteros. La puesta en escena del Hyperscreen resulta insuperable y supone todo un contrapunto a la tendencia minimalista que inició Tesla en los interiores de los coches de este tipo. Aquí, con todo un gran salpicadero convertido en pantalla para nosotros y también con un Head Up Display proyectando sobre el parabrisas toda la información, nos sentimos abrumados durante los primeros minutos.
El EQS conecta en ciudad imágenes de su red de cámaras y muestra sobre la pantalla central (de 17,7 pulgadas con esta configuración opcional) las que son relevantes en todo momento, ya sea para advertir algún peligro, como la distancia con un coche próximo, un peatón o un obstáculo, o simplemente para destacar los semáforos en rojo o para proyectar indicaciones del navegador sobre imágenes reales. Además, el citado HED también hace lo mismo sobre lo que vemos realmente en el parabrisas, con unos gráficos en realidad aumentada tan precisos que elevan la navegación a otro nivel.
Bien pertrechados en unos butacones amplios, con climatización y múltiples reglajes, la sensación general durante los primeros metros es la de ir trabajando como chófer para alguna gran personalidad de la capital. El confort de marcha es excelente, sobre todo por el nivel de insonorización que tenemos dentro, pero también por la ergonomía de los asientos y el espacio general. Entonces, decido salir rápido de un semáforo a ver que pasa y... ¡sorpresa! "Bruuuuummmm". ¿Perdona? El EQS ofrece un sistema de simulación de sonido que nos invita a pensar que llevamos un fino V8 atmosférico bajo el capó, pero el nivel de aceleración nos dice claramente que no, que estamos ante un eléctrico con capacidad para dejarnos anclados al asiento a la menor insinuación.
Por suerte, si queremos hacer la experiencia de conducción más realista, podemos desactivar este sistema, igual que podemo regular la respuesta del motor, la dirección, la suspensión y el ESP en los niveles: Confort y Normal. Eso sí, el comportamiento general del EQS no cambia demasiado: es un vehículo eminentemente cómodo, que se disfruta mucho más conduciendo a velocidades elevadas en autopista, que en tramos de curvas, donde su gran talla y peso le penalizan demasiado. Es decir, las sensaciones que ofrece son muy próximas a las de un Clase S de modo que tiene todo lo que esperará el cliente más exigente de la marca a nivel de lujo y confort, combinado con una mecánica eléctrica y un equipamiento a la última. Ni más ni menos.
En las curvas, las inercias se dejan notar claramente y no solo en los apoyos, también en las frenadas y aceleraciones donde apreciamos unos marcados cambios de pesos entre los ejes delantero y posterior. Igualmente, la dirección es poco comunicativa y el freno regenerativo ofrece un tacto al que hay que acostumbrarse. Desde las levas del volante, podemos actuar en la retención del coche con tres modos: conducción a vela, retención normal y retención intensa. En ese último, el pedal del freno se hunde para evidenciar que estamos deteniéndonos gracias a la inversión del sistema eléctrico. Solo si lo pisamos más, las pastillas entran en contacto con los discos.
Sin duda, la gran aportación de este modelo es que por primera vez una berlina puede ofrecer el nivel de confort, calidad general, equipamiento y lujo de un Clase S, combinado con una mecánica que no solo no emite gases a la atmósfera, también resulta bastante eficiente. Durante nuestra prueba, con un recorrido mixto de más de 200 kilómetros que mezcló ciudad, autovía y tramos de carretera secundaria, nuestro compañero de viaje no gastó más de 21 kWh a los 100 kilómetros, un consumo sorprendentemente similar al del ciclo WLTP (18,5 kWh/100) para el tipo de conducción que realizamos.
Gama y precios del Mercedes EQS
Un aspecto clave del EQS es su equipamiento tecnológico, que le ha permitido obtener el certificado de conducción autónoma de nivel 3 gracias a su amplio arsenal de sistemas de asistencia a la conducción. Para ello puede incorporar distintos sensores que entre otras cosas permiten aparcar y sacar el coche solo utilizando nuestro smartphone, así como también circular a velocidades de hasta 60 km/h gracias al sistema opcional Drive Pilot y un detector de fatiga llamado Attention Assist. A todas estas nuevas soluciones se suma el habitual repertorio de asistentes habituales en la gran mayoría de coches, como el control de crucero adaptativo o el control de ángulo muerto entre otros.
Además, el EQS puede disponer de elementos únicos como la apertura electrónica de todas sus puertas, con un sistema de seguridad activa incluido, filtro HEPA para purificar el aire que accede al habitáculo o el equipo de audio Burmester con 15 altavoces y 710 vatios de potencia.
Aunque no hay niveles de equipamiento como tal, Mercedes agrupo los extras en diferentes paquetes denominados: Advance, Premium, Executive, Night y cuero Napa. En función de los que añadamos, el aspecto del interior y exterior, el equipamiento tecnológico y el nivel de acabado, puede incluir cambios relevantes.
- Mercedes EQS 450+ (333 CV): 117.125 euros
- Mercedes EQS 580 4 Matic (523 CV): 146.625 euros
- Mercedes-AMG EQS 53+ 4 Matic (639 CV): N.D.
Valoraciones del Mercedes EQS
A favor: Confort a bordo. Equipamiento tecnológico. Eficiencia. Amplitud y calidad percibidas.
En contra: Dinamismo limitado. Precio de algunos extras. Tiempos de recarga.
Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.
Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.
