La gran estrella de Volkswagen en esta edición del Salón del Automóvil de Frankfurt ha sido un vehículo de tamaño compacto y no, no estamos hablando de la nueva generación del Golf, sino del eléctrico ID.3. Pero este modelo no ha sido la única novedad ecológica de la marca.
Sin tener en cuenta el ID.4 que veíamos en la jornada de ayer, el otro gran protagonista de la gama eléctrica de los alemanes ha sido el Volkswagen e-Up! 2020, es decir, una actualización de mitad de ciclo que permitirá a esta generación afrontar el resto de su vida comercial. Si bien es cierto que estéticamente no cambia nada, los principales argumentos del renovado urbanita se esconden debajo de la carrocería y afectan al tren de propulsión.
Por poner en contexto las cifras anteriores a esta actualización, el pequeño urbano eléctrico se conformaba con un propulsor de 82 caballos, una batería de iones de litio de 18,7 kWh y una autonomía de apenas 160 kilómetros. Los ingenieros de la marca eran conscientes de las limitaciones del coche y por ello han mejorado todos sus parámetros, algunos más que otros, eso sí.
Mientras que el motor eléctrico solo ha ganado 1 CV, la batería ha mejorado notablemente su capacidad y ahora ofrece un total de 32,3 kWh, lo que se traduce directamente en un incremento en el rango de uso del e-Up! 2020. De esta forma, el conductor podrá disponer de una autonomía de 260 kilómetros con una sola carga, según el nuevo ciclo de homologación WLTP.
Otra de las ventajas de la nueva batería es su compatibilidad con la función de carga rápida, por lo que el tiempo estimado para reponer su energía hasta el 80% es de solo una hora, siempre y cuando se utilice una toma de 40 kW de potencia. Además, su presencia permite al pequeño eléctrico acelerar más rápido de antes, al pasar de 12,4 a los 11,9 segundos actuales, con una velocidad máxima limitada de 130 km/h.
La marca alemana aún no ha desvelado el precio para nuestro mercado, aunque sabemos que en Alemania la cifra partirá de los 21.975 euros.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
