Antes de la reunión de los jefes técnicos y de la FIA de este viernes en Londres, una que podría trazar futuros conceptos de los coches de la Fórmula 1, Berger se ha sumado a los muchos que piden que se revisen las reglas de este deporte. Él sugiere que en lugar de centrarse en ajustes en la aerodinámica y en coches más anchos, el Gran Circo necesita una mayor reorganización, para que todo sea más emocionante.

"Los aficionados quieren ver más luchas en la pista y más acción también", asegura Berger para el periódico Salzburgo Nachrichten. "Pensando en mi época, un coche de F1 era como una bala perdida. Hemos tenido 1.400 CV sin tener tantas ayudas a la conducción. Hay que mantener a los aficionados viendo las carreras", completa.

Aunque muchas personas han señalado, que los niveles de dominio mostrados por el equipo Mercedes en estos tiempos, ya sucedió en el pasado a manos de otros equipos, Berger piensa que ahora hay grandes diferencias. Piensa que el hecho de que los coches sean ahora tan a prueba de balas, ha hecho que el deporte sea mucho menos emocionante.

"Había equipos dominadores en el pasado, pero teníamos también más abandonos", asegura el austriaco. "Hoy en día cada coche llega a la línea de meta, no hay más sorpresas. En los viejos tiempos, no se podía estar seguro hasta el final. Incluso en la última vuelta de la carrera no se podía estar seguro tampoco", finaliza.