Eric Boullier cree que el mal año que han experimentado en McLaren en 2015 no ha hecho más que traerle un mayor grado de humildad a todo el equipo.

Y es que la vuelta de Honda a la Fórmula 1 junto con los de Woking no ha sido lo exitosa que se esperaba, y el equipo ha sido penúltimo en el Mundial de Constructores con tan solo 27 puntos en lo que el francés considera que ha sido “de lejos” su temporada más difícil en la Fórmula 1.

Así, el director de carreras de McLaren es de la opinión de que los momentos difíciles que han atravesado durante la temporada pasada les ha mostrado cómo ser más humildes, aprendiendo de los errores para mejorar.

"McLaren es un gran equipo, Honda es una gran empresa y los dos tenemos una gran herencia", ha dicho a Autosport. "Mantener la confianza de la gente, la credibilidad y la moral alta es un duro trabajo. Definitivamente, lo que vimos (el pasado año) fue un gran éxito para construir el futuro", ha proseguido.

Es por eso que el galo no duda que el baño de humildad que han recibido en 2015 hará a todos y cada uno de los integrantes del equipo trabajar mucho más unidos para salir del bache y triunfar juntos en el Gran Circo.

"De alguna manera, lo malo será bueno para McLaren porque trajo humildad, y quizá de forma extraña, el ambiente en el equipo fue bastante bueno. No estoy diciendo que la gente estuviese emocionada por los resultados, todos estábamos frustrados, pero el ambiente, el compromiso del equipo y el entendimiento eran enormes", ha confesado.

"O explota el sistema o todos se reagrupan”, señala en referencia a la presión que existe de cara a encontrar una solución para no repetir un año con tan malos resultado. "Todos sienten la presión. Mi primera presión es ganar, y no necesito otra presión que esa", ha concluido.