El elevado coste que se calcula que tendrán los nuevos motores V6 Turbo podría poner punto y final a la relación comercial entre la escudería Sauber y Ferrari, que desde 1997 se ha encargado de propulsar los monoplazas de Hinwil si bien es cierto que BMW lo hizo durante tres años entre 2006 y 2009.

Monisha Kaltenborn, la directora ejecutiva de la escudería, ha explicado que equipo suizo está especialmente preocupado por su coste. "Ya hemos dejado claro que el aspecto financiero es muy importante para nosotros", aseguró en declaraciones al portal alemán motorsport-total. "No queremos volver a los días en los que uno tenía que pagar mucho más dinero por los motores".

La voluntad de la escudería es continuar con Ferrari, pero todavía no se ha tomado ninguna decisión final al respecto. "Es obvio que primero hablaremos con nuestro suministrador de motores actual, ya que mantenemos una larga relación, pero todo está abierto. Pienso que ellos tampoco saben mucho más que nosotros sobre ciertos aspectos".

Puesto que existe la posibilidad de que el proyecto PURE no llegue a ver la luz y de que Cosworth se retire con la llegada de los V6, todo apunta a que en el futuro Sauber deberá escoger entre Ferrari, Mercedes y Renault.

Hace unas semanas les informamos de que Volkswagen había descartado entrar en la categoría reina pese a los rumores que surgieron tras una reunión entre Peter Sauber y el presidente del Grupo, Martin Winterkorn. Kaltenborn ha desmentido que su equipo esté interesado en los motores de Wolfsburgo. "Eso es todo, no hay nada más que decir. No estamos en negociaciones".

Renault decidirá en septiembre el número de equipos a los que suministrará el V6 en 2014