Con el debut oficial del nuevo Nissan Z, la comunidad de entusiastas ha dado la bienvenida a un nuevo integrante del segmento de los coches deportivos de precio razonable. Para bautizarlo, la gente de Hagerty quería ver cómo se comporta la nueva generación del Z con algunos de sus rivales actuales. Afortunadamente para todos nosotros, eso significa que tenemos una apasionante carrera de aceleración por delante.
Motor de seis cilindros
Para probar dónde cae el nuevo Z en la jerarquía de los coche deportivos, Jason Cammisa de Hagerty invitó a algunos de los competidores del segmento a una pista. Estos oponentes incluyen el Ford Mustang Mach 1 y el Toyota GR Supra, ambos con transmisiones automáticas. Los 480 CV y 570 Nm del Mustang lo convierten en el vehículo más poderoso del grupo, aunque también es el más pesado debido a sus 1.750 kilos. El Nissan pesa alrededor de 115 kg más que el Toyota, pero ese motor de 3.0 litros con sus 400 CV y 475 Nm son suficientes para tomar la delantera en esa categoría. Dicho esto, sabemos que las especificaciones de Toyota –382 CV y 500 Nm– son un poco conservadoras.
Con la ayuda de un poco de magia de edición de vídeo, podemos ver cómo los tres cupés se disparan por la pista con estilo. El Toyota parece dar un pequeño salto sobre el muscle car V8, pero eso no se mantiene por mucho tiempo. De hecho, los dos rivales lograron alcanzar las 60 mph en unos idénticos 3,8 segundos, antes de completar el 1/4 de milla en 12,1 segundos. El Mustang se detuvo a una velocidad ligeramente mayor de 120 mph, en comparación con las 117 del Supra. El Nissan se quedó atrás de ambos competidores, registrando un 0 a 60 mph en 4,0 segundos y un pase de 1/4 de milla de 12,3 a 116 mph. El Z tenía una tracción limitada desde el comienzo de la carrera, lo que, según Cammisa, podría deberse a los Bridgestone montados de serie. Los otros dos vehículos vienen equipados con gomas Michelin.
Manual vs. automático
El Z automático puede quedar un poco por detrás de sus rivales del segmento, pero eso no significa que se quede atrás. Dicho esto, no mire a la variante manual como una forma de valor atípico. Cuando Cammisa enfrentó a los dos Z, las cosas no le fueron bien al modelo de tres pedales. Solo las relaciones de transmisión en la caja automática aseguran que se ofrece alrededor de un 10 por ciento más de par máximo. La unidad automática también suena mejor, ya que las marchas adicionales permiten que el fabricante japonés supere más fácilmente la regulación de ruido en comparación con una caja de cambios tradicional.
Entonces, podría parecer fácil descartar el futuro del Z equipado con transmisión manual como corredor de semáforos. Pero la velocidad que ofrece el cupé deportivo está a la par con algo que probablemente nunca cuestionarías: un Aston Martin Vantage. Bueno, un Vantage equipado con un V8 de 4.7 litros de 2010 como mínimo. Aún más impactante, los dos coches tienen casi exactamente el mismo tamaño y peso, y producen niveles similares de potencia y par motor.
Cuando se enfrentaron entre sí, el Nissan sacó una ventaja de una décima al Aston en la maniobra del 0 a 60 mph, que se completó en solo 4,3 segundos. Sin embargo, el modelo británico logró recuperar esa décima, ya que completó el 1/4 de milla en 12,7 segundos a 112 mph. El Nissan lo hizo en 12,8 segundos a una velocidad idéntica de 112 mph. Ponga mejores neumáticos en el Nissan y esa carrera casi seguramente habría sido diferente. Eso es realmente cierto para todas estas pruebas, lo cual es una gran razón para estar entusiasmado con la esperada llegada del Z. Una pena que no lo veamos por Europa.
Born and raised in Metro Detroit, associate editor Lucas Bell has spent his entire life surrounded by the automotive industry. He may daily drive an aging Mustang, but his Porsche 944 and NB Miata both take up most of his free time.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
