Monisha Kaltenborn, jefa de Sauber, cree que la idea del motor independiente crearía un sistema negativo "de dos niveles" en el deporte, a pesar de que estos propulsores necesitarían de un menor presupuesto comparado a las actuales unidades de potencia que ofrecen actualmente los fabricantes.

La FIA siguió adelante la semana pasada, abriendo un proceso de licitación para que se presentasen los motoristas que estuvieran abiertos a ofrecer un motor independiente. En declaraciones para Auto Motor und Sport, la jefa de Sauber expresó sus objeciones a la propuesta de la FIA.

"Creo que no es bueno para el deporte que cambiemos de reglamento de nuevo. Eso sería malo para la imagen ya que volverá a decir que estamos en otro mundo al margen de la realidad. El siguiente paso sería tener problemas con los patrocinadores, que luego no quieren participar. Otro problema es la implantación de toda la idea", confesó Kaltenborn.

"Tendríamos dos niveles, por lo que no es una buena solución. ¿Cómo se puede crear paridad, con diferentes rendimientos? Más bien deberíamos centrarnos en reducir el precio de los motores actuales", continúa Monisha.

El equipo suizo está actualmente octavo en el Campeonato del Mundo de Constructores, con 36 puntos, después de recuperarse de los peores resultados de su historia al no anotar punto alguno en el 2014. "Entre seis y siete millones, me parece mucho. Espero que Ferrari nos ofrezca el actual motor por este dinero. Simplemente no puedo imaginar que todo pase por el motor. Ferrari tiene un derecho de veto, ¿así que por qué hablar de algo que sabemos que al final quedará archivado?", recuerda.

El punto de vista de Kaltenborn, contrasta con su homólogo de Red Bull, Christian Horner, que recientemente describió la idea del motor independiente como "pan comido". "Es crucial porque estamos demostrando claramente que no hay reglamento que dicte a los proveedores de motores la obligatoriedad de suministrarlos, y mucho menos a un precio competitivo. Así que un motor independiente para el futuro de la Fórmula 1, para nosotros, es una obviedad. Si no se puede conseguir motores en otros lugares, entonces no puedes competir, por lo que es importante contar con un propulsor competitivo, económico, y de no ser los motores actuales, entonces es necesario que haya otro motor. Jean Todt, presidente de la FIA, se ha tomado la situación muy en serio, y ha dicho claramente cuáles son sus planes", comentaba Horner.

Kaltenborn habló también sobre la denuncia que su equipo presentó, junto a Force India, ante la Comisión de la UE con respecto a la forma en que la F1 es administrada y gobernada. La austriaca, nacida en la India, explicó que los equipos se mostraron preocupados por los privilegios que disfrutan las escuderías más grandes en sus negociaciones con Bernie Ecclestone, lo que les da opciones a tomar medidas.

"Nos preocupa pues no estamos de acuerdo con los privilegios que se han otorgado a algunos equipos, que por razones monetarias, se creen con derecho a tomar decisiones. Si finalmente se da cuenta que esto no tiene sentido, todo esto mejorará", expone.

Así, Kaltenborn deja clara su firme oposición a la propuesta de motor independiente para el 2017. Como Sauber es un equipo pequeño y activista para reducir los precios, se podría decir que la oposición del equipo suizo al plan de motores más baratos es sorprendente. De hecho, Kaltenborn, está de acuerdo con los precios cobrados por los fabricantes de las unidades de potencia actuales.

"Los fabricantes están construyendo estos motores de todos modos. Nadie está diciendo que tengamos que volver a los precios de los V8, pero tiene que haber un término medio", repite Kaltenborn.