El reciente fallecimiento del tres veces campeón del mundial de F1, Jack Brabham, ha gozado de una gran repercusión dentro de Australia. Su pérdida ha causado tal conmoción, que el funeral del mítico piloto australiano recibió honores de Estado.

Durante la celebración de dicho acto, la figura de Brabham fue honrada también con el reconocimiento a su labor en favor de la "Southport Church of Christ", honor que estuvo acompañado por las palabras del primer ministro Tony Abbott. Este lamentó la pérdida que Australia ha sufrido tras la marcha de Sir Jack, alguien que contribuyó a hacer mejor la historia de su nación.

"Australia ha perdido una leyenda. Sir Jack dejó una vida de inspiración. Sirvió en nuestro ejercito, hizo historia en la pista y apoyó la lucha contra la degeneración macular. Los australianos siempre recordarán sus logros y su espíritu".

En los momentos del entierro, el féretro de quien logró por primera vez en la historia ganar un mundial con un equipo propio estuvo arropado por una bandera de cuadros y acompañado por un volante de la época.