La desesperación de Alonso la pagó el comisario que trataba de auxiliarle en la puzolana. Y es que el español esperaba ser empujado hasta la pista, y mantuvo el motor encendido. Pero no hubo suerte y tuvo que bajarse de su monoplaza. Además, no le cuadran las cuentas: el Ferrari es demasiado. Así que finalmente saldrá duodécimo en la carrera de mañana. Felipe Massa, su compañero de equipo, no estuvo mejor: pese a mantenerse sobre la pista, terminó decimosexto.

Fernando Alonso reconoce estar desconcertado con el comportamiento y el rendimiento del Ferrari F2012, hasta el punto que asegura ignorar dónde se encuentra en comparación con los rivales: “No sé cuáles son sus posibilidades. Hay que hacer una media entre los dos pilotos y esa es la situación del coche”, declaró en la rueda de prensa posterior a la clasificatoria. El problema, asegura Fernando, no fue el trompo, sino el coche en sí: “Sin salirme quizá no hubiera entrado en la tercera tanda; y si hubiera entrado, quizá me hubiera quedado sin neumáticos, así que no sé qué habría sido peor".

Así pues, el plan para mañana es aprovechar al máximo la salida y remontar desde el primer metro: "Con una buena salida podré meterme entre Vettel y Rosberg, que están dos filas por delante". Alonso empieza a dar algunas claves para mejorar el F2012: Hay que trabajar en "el agarre y la velocidad punta". Pese a todo, Alonso asegura que este año está mejor que el pasado: "La pasada temporada estaba a 1,4 segundos del primero; en la segunda tanda de este año estaba a un segundo. Así que, entre comillas, estamos mejor. Pero tenemos que mejorar", reconoce Alonso, que recuerda que el año pasado sólo ganaron en Gran Bretaña, novena carrera de 2011; "Este año no podemos esperar a la novena carrera para ganar".

Alonso asegura que mañana correrá "a la defensiva". Ahora toca recomponerse y poner buena cara al mal tiempo; otra estrategia es inútil: "Lo único que podemos hacer es trabajar para mejorar nuestro rendimiento. Enfadarse no sirve de nada y no tiene sentido", concluye el español bicampeón mundial.