Fabra ha insistido en las ventajas que ha supuesto este Gran Premio para la ciudad de Valencia: "Hemos podido ser la imagen de prosperidad, de modernidad y de futuro, a través de la televisión y en un Gran Premio, de toda Europa. Y en ese sentido, mostrarle confianza, que queremos seguir siendo la ventana de Europa y que desde luego vamos a seguir trabajando", ha dicho en la Feria de Valencia, durante la inauguración del certamen Iberflora.

El presidente del gobierno valenciano ha dejado claro, sin embargo, que necesitan reducir los costes del evento para continuar en esta élite deportiva: "Eso sí, tenemos que ser más eficientes, tenemos que ajustarnos en algunas cosas y queremos, con menor coste, poder seguir ofreciendo lo mismo, y en eso estamos", ha explicado, sin precisar si se trata de una exigencia para Bernie Ecclestone y su canon millonario o una cuestión de la organización.

La semana pasada, la Consellera de Turismo, Cultura y Deportes del gobierno valenciano, Dolores Johnson, aseguró a la agencia EFE que Valencia cumplirá con el actual contrato que les compromete a celebrar una carrera por año hasta 2014 y, aunque entre líneas se pudo leer que podrían alternar con Montmeló como sede de un solo Gran Premio en España, este extremo fue desmentido a los pocos días por Jorge Martínez 'Aspar', vicepresidente de Valmor Sports, empresa organizadora del Gran Premio de Europa desde 2008.

Por su lado, la acaldesa de Valencia, Rita Barberá se mostraba optimista sobre la continuidad de Valencia como sede de un GP tras reunirse el pasado sábado con Bernie Ecclestone y presentarle al nuevo Presidente de la Generalitat. Como Francisco Camps ya no está en el gobierno y Ecclestone había negociado personalmente con él, Barberá pretende que el magnate de la F1 estreche lazos con Alberto Fabra para reanudar así las negociaciones sobre el futuro del GP urbano, que se encuentran todavía en 'stand-by' tras la dimisión de Camps.