Sobre la carrera de China, Kimi Raikkonen ha explicado la razón de haber acabado tan atrás después de haber luchando incluso por el podio en Shanghái: "No hubiera conseguido luchar por el segundo puesto si no hubiéramos hecho una tercera parada, teníamos que arriesgar y exprimir el juego de gomas al máximo, en la recta final el rendimiento del neumático empezó a caer en picado y no pude mantener a mis rivales atrás, creo que deberíamos haber alargado el segundo stint para prevenir eso".

También se mostró contento con el comportamiento del coche. "El E20 es muy agradable de conducir, tenemos estabilidad en las curvas, aunque quizás deberíamos mejorar la velocidad punta. Ha sido una pena que el viernes estuviera mojado y no pudiéramos ajustar del todo las mejoras que traíamos. Pero, en general, estoy contento", ha añadido Kimi.

En cuanto a Bahréin, el piloto finlandés cree que no tendrán demasiados problemas con el coche. "No cree que nos presento ningún problema. El clima es bastante caluroso, y nuestro coche no se comportó bien en China, donde teníamos temperaturas templadas. Es un circuito bastante divertido con muchas curvas rápidas, además hay bastantes zonas donde adelantar".

"Creo que un podio es nuestro objetivo en Bahréin, es un objetivo factible viendo el rendimiento del coche en las últimas carreras". Ha afirmado Raikkonen bastante optimista. "Aunque no sabremos cómo se comporta allí hasta que lleguemos, no esperamos ningún problema".