Seguramente todos los que en los años 80 hacíais vuestros primeros ‘pinitos’ al volante recordaréis con nostalgia modelos como el Peugeot 205 GTI o el Renault 5 GT Turbo, dos auténticos GTI que marcaron una época. Actualmente este segmento ha sufrido una gran evolución con la aparición de unos herederos mucho más sofisticados como son el Peugeot 208 GTI 30thy el Renault Clio RS. Junto a estas propuestas ‘convencionales’, como no podía ser de otra forma dado el especial auge que tienen los SUV actualmente, Nissan se ha ‘aventurado’ a crear un todocamino deportivo sobre la base del Juke y con el apoyo de Nismo –Nissan Motorsport–, la división de la marca que modifica los modelos de serie para hacerlos más radicales. El ‘experimento’, denominado Nissan Juke Nismo RS, convence aunque tiene sus peculiaridades...

Efectivamente, el crossover de Nissan tiene algunas diferencias con respecto a sus rivales, como son una posición de conducción más elevada, además de una versión con tracción integral desconectable y ciertas ‘aptitudes’ para conducción todo terreno, ya que cuenta con más distancia con respecto al suelo. En esta ocasión, además, probamos la versión RS que incluye una suspensión aún más rígida, motor más potente y leves retoques estéticos.

En el caso del 208 también estamos ante una serie especial, concretamente la que conmemora los 30 años transcurridos desde la comercialización del 205 GTI. Ha sido desarrollado por la división Peugeot Sport y su comercialización se limita a 500 unidades, tiene cambios bastante profundos, tanto mecánicos como estéticos, como iremos desgranando.

Por último, el Renault Clio RS es una ruptura total con el modelo anterior dado que estamos ante una versión con motor turbo –antes atmosférico– y solo disponible con cambio automático, eso sí de doble embrague, y carrocería cinco puertas.

Motor vehicle, Mode of transport, Steering part, Transport, Steering wheel, Center console, Technology, White, Car, Electronic device, pinterest

Diferencias tecnológicas

Tanto el Juke Nismo RS como el 208 30th cuentan con una puesta a punto específica y más radical con respecto a sus versiones GTI. El japonés va únicamente ligado a una caja de cambios automática CVT que Nissan denomina Xtronic y que se asocia de serie al 4x4. Se trata de un sistema de variador continuo que sin embargo permite una utilización mediante levas. En este sentido, el Renault Clio es más avanzado ya que también utiliza un sistema automático, pero de doble embrague. Denominado EDC, se incluye por primera vez en un modelo de serie de Renault Sport y tiene una utilización de uso secuencial y permite elegir entre tres modos de conducción –Normal, Sport y Race–. También dispone de levas fijas detrás del volante. Por su parte, el 208 recurre a un cambio manual de seis velocidades que tiene un tacto preciso y con un accionamiento bastante rápido.

Otra particularidad única del Nismo RS es el sistema de tracción integral All Mode que limita el subviraje al enviar más par a la rueda exterior trasera, lo que ayuda a mantener la trayectoria marcada. Además de repatir el par entre ejes –hasta un máximo de un 50%–, permite dividir la potencia que llega al eje trasero ente las dos ruedas del mismo.

Curvas y más curvas

Una vez al volante, las diferencias de puesta a punto y concepto marcan las distancias. En el caso del Nismo, un bacquet ‘auténtico’ firmado por Recaro ya nos anuncia que las concesiones al confort van a ser mínimas. Aunque tiene regulación en altura, el margen de ajuste es bastante escaso y condiciona la posición al volante, ya que además el volante no se regula en profundidad. Acoplarse a este cockpit exige un periodo de adaptación aunque una vez sentados la posición es bastante deportiva a lo que se añade una instrumentación muy completa, pero la visualización de algunos datos es complicada, ya que la pantalla de la consola central es bastante pequeña.

El 208 es muy diferente en este apartado. La postura de conducción es excelente gracias a las amplias regulaciones que ofrecen tanto los asientos –unos tipo bacquets firmados por Peugeot Sport–, como el volante, que además también se ajusta en profundidad. Estas butacas sujetan bien y son cómodas, algo que no sucede en el Nismo. Asimismo y al igual que en los 208 normales y 308, el aro del volante es pequeño y bajo, y en un primer momento puede resultar chocante, si bien después de recorrer varios kilómetros nos encontramos con un puesto de conducción francamente bien resuelto, que incluye hasta unas exclusivas alfombrillas específicas.

Motor vehicle, Steering part, Automotive design, Steering wheel, Technology, Center console, Car, White, Glass, Electronic device, pinterest

En el caso del Clio, la posición ha mejorado con respecto a la anterior generación y aunque presenta unos asientos ‘convencionales’ resultan correctos pero menos vistosos que los de sus rivales, algo que también se aprecia en el resto del interior o incluso de la línea exterior, donde la sobriedad es la nota dominante. De hecho, Renault solo comercializa el Clio con carrocería de cinco puertas y dota así a esta versión de un mayor carácter práctico, algo que se corrobora a medida que ‘convivimos’ con el modelo.

Sensaciones sobre ruedas

Arranque por botón, cinturón de seguridad bien ajustado y comienza el momento de iniciar la conducción. El Nismo desde un primer momento nos sorpende con un comportamiento diferente. Su carácter es bastante radical y tan sólo el cambio por variador CVT no está a la altura del resto del conjunto, si atendemos a un enfoque deportivo 100%. A pesar de contar con levas y un escalonamiento a modo de velocidades, éstas no son tales y el resbalamiento es continuo, pero a cambio la potencia fluye de manera constante y no se producen los tirones que provoca el selector EDC de Renault en algunas circunstancias de utilización.

Por el contrario, en un uso más pausado, el CVT se muestra muy neutro y cómodo de utilizar, dado que la potencia que proporciona el motor del Nismo es bastante elevada y este cambio es capaz de mantener en un régimen constante al propulsor, es decir en la zona media, justo cuando se produce la mejor entrega de par. Además, contar con un sistema de tracción integral siempre aporta un plus de seguridad y, en este caso, no es una excepción. Las pérdidas de tracción no se producen y la motricidad es excelente en todo momento. Además, el buen tarado de las suspensiones también favorece este comportamiento. Perfectamente encajados en los Recaro es posible afrontar trazados sinuosos con bastante agilidad, aunque sin olvidar que nos encontramos ante un SUV que por concepto nunca podrá competir con un ágil compacto como por ejemplo es el 208.

Motor vehicle, Steering part, Steering wheel, Automotive design, Technology, Center console, Automotive mirror, Glass, Vehicle audio, Gauge, pinterest

Carácter GTI

Efectivamente, el Peugeot podría calificarse como el ‘auténtico’ GTI de esta comparativa, dado que el Clio se ha dulcificado en esta última generación. Su comentada posición de conducción permite estar perfectamente integrado. Al poco de inciar la marcha se aprecia una dirección precisa y rápida y una excelente agilidad entre curvas combinado con una buena motricidad, algo en lo que influye el diferencial autoblocante de deslizamiento limitado Torsen procedente del RCZ R. Los cambios de trayectoria se producen de forma un tanto neutra acompañados por una suspensión bastante rígida y unas vías, tanto delanteras como traseras, que se han ampliado en esta versión 30th –22 milímetros y 160 respectivamente–. Asimismo destaca el equipo de frenos que viene firmado por Brembo. Son toda una garantía de tacto y resistencia a la fatiga y en carretera de montaña con abundantes cambios de rasante presentan una excelente resitencia al fadding.

Tanto Nissan, como Peugot y Renault consiguen transmitir con sus propuestas deportivas un buen cúmulo de sensaciones

Este conjunto se redondea con un motor que pertenece a la gama THP y ha visto incrementada su potencia, gracias a cambios en la gestión electrónica y sistema de escape, hasta los 208 caballos, ocho más que la versión GTI. Ofrece un comportamiento contundente a partir de 2.000 revoluciones y se muestra muy lleno y enérgico, resulta muy agaradable de utilizar en conducción rápida, gracias también al buen tacto que ofrece el cambio manual, el único disponible.

Carácter versátil

La división de competición de la marca francesa, Renault Sport, firma la fabricación del nuevo Clio RS, que aporta variaciones significativas como son un motor con turbo y cambio automático EDC. Las plazas delanteras son amplias y ergonómicas y permiten al conductor centrarse en una conducción que no resulta tan racing como ocurre en sus rivales. No hay diferencial autoblocante, pero sí un botón Renault Sport que actúa sobre la dirección, pedal del acelerador y cambio y enfatiza el carácter deportivo que también ofrece el bloque 1.6 de inyección directa y turbo que proporciona un buen par desde un régimen de giro bastante bajo, y está ayudado además por el comentado selector EDC. Éste es bastante rápido aunque no tiene un funcionamiento tan afinado como por ejemplo un DSG de Volkswagen.

En definitiva, tanto Nissan, como Peugot y Renault consiguen transmitir con sus propuestas deportivas un buen cúmulo de sensaciones, pero que difieren mucho de aquéllos GTI de los ochenta. Pero como se suele decir, son otros tiempos...

Precio, equipamiento y ficha técnica del Nissan Juke Nismo RS 4x4

Precio, equipamiento y ficha técnica del Peugeot 208 GTI

Precio, equipamiento y ficha técnica del Renult Clio RS EDC

Mode of transport, Automotive design, Vehicle, Land vehicle, Car, Hatchback, Alloy wheel, Bumper, Crossover suv, Trunk,