El enfado de Sergio Pérez con su compañero Esteban Ocon continúa desde su incidente en el pasado Gran Premio de Azerbaiyán, donde el piloto francés impactó contra el mexicano tras una reanudación del Safety Car.

Por ello, 'Checo' indica que espera que el piloto de 20 años demuestre que ha aprendiendo de su error y que entienda que situaciones así no pueden volver a suceder, especialmente desde un punto de vista del equipo.

"Creo que se ha hecho algo más que un libro de reglas para asegurarnos de que con Esteban somos libres para competir, pero es lo que significan las carreras. Si te dicen que eres libre, pero simplemente empujas a tu compañero contra la pared, ese no es el camino correcto. Espero que sea lo suficientemente inteligente como para entender qué hizo mal y cambiar un poco su actitud en beneficio del equipo", explica el mexicano a la web estadounidense Motorsport.com.

"Esteban tiene que entender qué significan las carreras. Competir significa correr contra otro coche, no chocar contra él. Creo que todos los compañeros de equipo de la parrilla son libres para competir y obviamente con respecto entre ellos y para los otros rivales. En cuatro años con Nico Hülkenberg nunca tuvimos un problema y éramos libres para competir. Tuvimos grandes batallas en la pista pero siempre fuimos libres. Creo que tan pronto como Esteban entienda lo que significa correr, lo tendrá claro", señala.

"Empujar a tu compañero contra la pared no es el camino correcto"

De ese modo, Pérez vuelve a explicar que dejó el espacio suficiente para que ambos pudiesen continuar en carreras sin problemas y reconoce que nunca se había visto en una situación tan tensa con un compañero de equipo.

"El movimiento ya estaba hecho. No creo que podamos culpar a la curva porque ya estábamos en la recta y nos tocamos en ella. Él ya estaba delante de mí y no dejó suficiente espacio. No había necesidad de contacto, no creo que haya que ser un genio para entender lo que pasó. Creo que lo que pasó en Bakú fue totalmente inaceptable desde el punto de vista del equipo. En toda mi experiencia, la competencia con mis otros compañeros ha sido muy intensa pero nunca así, nunca como para chocar innecesariamente contra el otro. Le di suficiente espacio para la maniobra. Ya estaba por delante, por lo que no había necesidad de arruinar nuestras carreras. Al final del día, es el equipo quien paga el precio", concluye.