Concluyó la tercera prueba del mundial de 2016 en Shanghái, donde el Mercedes de Nico Rosberg se impuso con suma claridad sobre sus rivales. El alemán, que suma su sexta victoria consecutiva, no puede estar más contento por su inicio de campaña como no disimula.

"Tuve un coche realmente veloz hoy, así que me sentí genial, y pude abrir una buena distancia desde el inicio. Así que fue un gran fin de semana para mí en China, y es un lugar especial para mí porque es donde conseguí mi primera Pole y victoria, y por suerte todo salió bien incluyendo la estrategia", ha dicho Rosberg.

En el segundo escalón del podio estuvo Sebastian Vettel, quien tuvo un fin de semana muy movido, sobre todo después de chocar con su compañero de equipo y enviarle fuera de pista. En carrera rompió dos alerones delanteros, pero al final pudo remontar con grandes adelantamientos.

"El coche del año pasado era bastante bueno, y creo que hemos dado un paso más hacia delante con todo el coche y la unidad de potencia así que tengo confianza de que en Rusia tengamos un fin de semana más sólido. Pero obviamente estoy decepcionado por el contacto de la primera vuelta y eso me movió el volante y tuve algunos problemas durante toda la carrera", reconocía Vettel.

El hombre más feliz del día era el ruso Daniil Kvyat, quien logró su segundo podio en F1 y fue duramente criticado a la cara por Vettel, quien le culpa del choque con el otro Ferrari en la primera curva porque Kvyat se le metió por el interior, aunque no hubo contacto entre ellos.

"Tuve una gran salida y este tipo de movimientos son los que te dan en el podio, y bueno, aquí estoy en el podio. Seguiré haciendo este tipo de movimientos arriesgados y eso es lo que todos deberían esperar de mí", concluye