Como piloto Ferrari, Sebastian Vettel espera un Gran Premio de Italia diferente. Sobre el podio de 2013, con los colores de Red Bull, el alemán fue abucheado como rara vez se ha visto en este deporte. Ahora en 2015, este piloto, con 28 años, pretende llegar al podio para recibir el aplauso de los tifosi.

"En 2008, con mi primera victoria, los aficionados se volvieron locos. Creo que apreciaron lo que había hecho, sobre todo porque estaba en un equipo italiano (Toro Rosso) con motor Ferrari", explica para el diario Kolner Express.

Tras eso, el aprecio de los tifosi descendió rápidamente. "Nunca fui muy popular en Monza", comenta para el diario Turun Sanomat. "Con suerte, este fin de semana resolveré esos problemas. Cuando gané otra vez con Red Bull estaba igual de contento pero me abuchearon. Fue entonces cuando me di cuenta de que la gran diferencia en este circuito que supone con qué coche logres la victoria en Monza. Así que ahora estoy contento de que los tifosi me apoyen", finaliza, esperando subir al podio este fin de semana.