La última carrera quedará para el olvido para Daniel Ricciardo y Red Bull, que tan solo sumaron puntos gracias a la actuación de Daniil Kvyat, mientras el australiano luchaba simplemente por acabar la prueba en un RB11 completamente desconocido. No obstante, Ricciardo está de suerte porque en el próximo Gran Premio de Austria estrenará un nuevo chasis, aunque admite que en Montreal ese no era su problema.

El piloto desconoce el porqué de su mal rendimiento en Canadá, pero asegura que ni el chasis ni su pilotaje son los responsables. "No sé qué pasó. Fue mi peor carrera. Aún puedo mantener la sonrisa porque sé que hubo algo mal con el coche. No soy un segundo más lento que Kvyat y no me he olvidado de pilotar", asegura para Auto Motor und Sport.

Sin embargo, este fallo no estaría relacionado con el chasis, aunque lo sabremos en el Gran Premio de Austria, en el que Red Bull estrenará un nuevo RB11. "Lo descubriremos en Austria, ya que está programado que tenga un nuevo chasis ahí. No creo que sea el chasis, ya que nunca toqué los muros ni apuré los bordillos. No hay nada que pudiera explicar ese tipo de daño", añade Ricciardo.