El clima en Mclaren-Honda no es el mejor que podría existir y no es para menos, porque aunque tienen un coche que parece ser rápido, no es fiable y si estas dos variables no van cogidas de la mano, los resultados no llegan.

La carrera de Australia, como ha confirmado Jenson Button fue un "reto", un test más para el monoplaza y de ahí que no fuera difícil de imaginar un abandono de alguno de los dos coches, en este caso del de Kevin Magnussen.

"Desde luego, el fin de semana en Melbourne fue un gran reto para nosotros, pero pudimos sacar algunas conclusiones positivas. Llegamos con desconocimiento sobre nuestro rendimiento dado el poco rodaje que tuvimos durante lo tests de invierno. A pesar de terminar últimos, llegar hasta la bandera de cuadros significó que ahora tenemos muchos más datos y podemos aprender enormemente de ellos", ha comentado el británico.

Ahora toca olvidar Melbourne y centrarse en el GP de Malasia en Sepang, una carrera que será muy exigente por las altas temperaturas que pondrán al límite la mecánica de los monoplazas y una climatología incierta que Button confía que les ayude a extraer cosas positivas del MP4-30.

"El Gran Premio de Malasia será otro paso delicado en nuestro proceso de aprendizaje. Muchas veces es una carrera impredecible y las temperaturas extremas pondrán a prueba el coche y los neumáticos hasta límites no probados en los tests de invierno. Con el añadido de la posibilidad de lluvia, será interesante ver como rinde el monoplaza durante condiciones variables. Nuestro objetivo es incrementar el kilometraje durante todo el fin de semana. Sepang por sí es un circuito fantástico – me encanta correr allí y tengo recuerdos de grandes batallas y mi victoria en el 2009. Es uno de los favoritos entre los pilotos por sus curvas super rápidas, rectas largas y muchas oportunidades para adelantar. El calor es siempre brutal pero puedes estar seguro que es una buena prueba para ver la buena forma del piloto y un lugar donde nuestros duros entrenamiento tienen su fruto", ha dicho el británico.

Fernando Alonso, por su parte, debutará esta temporada tras perderse la cita inaugural por prescripción médica tras su accidente en los test de pretemporada.

El español está recuperado y se siente preparado para un fin de semana tan duro como el que tendrá en Malasia, en el que espera ayudar al equipo a desarrollar el monoplaza todo lo posible para poder sacar cuanto antes todo el potencial del monoplaza.

"Observaba atentamente todo lo que pasaba en Australia y estuve en contacto con el equipo desde el momento que llegaron", ha apuntado. "Está claro que tenemos mucho trabajo por delante pero desde el punto de vista de rendimiento y recopilación de datos, el resultado de Jenson es alentador, algo extremadamente importante".

"He estado entrenando físicamente, me siento bien y preparado para este fin de semana. El calor de Malasia es siempre agotador para los pilotos por eso he programado mi preparación para estar en óptima forma, sean cuales sean, las condiciones meteorológicas que nos encontraremos en Sepang. Este circuito, gracias a su combinación de largas rectas y curvas rápidas, lo convierten en uno de los mejores para adelantar. Siempre ha sido uno de mis preferidos; es muy emocionante conducir aquí. He ganado tres veces en Malasia, incluido el 2007 con McLaren, y aunque estamos muy lejos de los puestos delanteros, todo el mundo en McLaren-Honda está trabajando duro para desarrollar un paquete de mejoras y mantener el ímpetu con cada carrera", ha proseguido el asturiano.

"Este fin de semana será duro pero tengo muchas ganas de subirme al MP4-30 por primera vez en un Gran Premio y volver a competir. He estado con el equipo y en el simulador en la fábrica y mi objetivo es seguir desarrollando nuestro proyecto con mis ingenieros a la vez que trabajar en el equilibrio y el set-up para la carrera. Hay mucho potencial en el coche y seguiremos empujando en cada carrera hasta que veamos resultados".

Kevin Magnussen ha mostrado su emoción por haber podido pilotar el MP4-30 el primer fin de semana de Gran Premio del año aunque no pudiese participar en la carrera por problemas en su unidad de potencia cuando se dirigía a la parrilla de salida.

"Obviamente, el resultado en Melbourne fue muy decepcionante para mí. Fue una oportunidad fantástica para subirme al coche y trabajar con el equipo en desarrollar el monoplaza, y me ilusionó ser el sustituto de Fernando. Estaba preparado para el fin de semana aunque supe que sería un enorme reto. Tenía muchas ganas de demostrar a los ingenieros que podía trabajar estrechamente con ellos y aportar crítica constructiva en cada sesión", ha señalado el danés.

"Desafortunadamente, el día de la carrera no pudo ser y no llegué a la parrilla de salida. A pesar de ello, aprendimos mucho y ser parte del equipo con Honda fue una gran experiencia. El equipo entero empuja fuerte hacía Malasia y como siempre, yo aportaré lo que pueda".

Respecto a la próxima carrera que se celebrará este fin de semana sabe, como todos sus rivales, que el calor y la humedad serán los grandes rivales, además de la más que probable lluvia durante las sesiones.

"Malasia será un gran reto y será totalmente diferente a lo que nos tuvimos que enfrentar en Melbourne. Dado el calor y la humedad extrema, será complicado encontrar un equilibrio correcto para las condiciones variables y para las curvas rápidas", ha agregado Kevin.

En el caso de Eric Boullier, el jefe del equipo, ha expresa sin esconderse que los resultados no son los esperados pero se queda con la parte buena de los muchos datos recogidos durante la carrera en Albert Park.

"Obviamente el resultado de Melbourne no es uno que McLaren-Honda hubiera querido. Sin embargo nuestro kilometraje durante el fin de semana resultó muy valioso y hemos aprendido mucho de los datos recopilados. También fue alentador participar en cada sesión, lo cual nos permitió progresar en las comprobaciones del sistema, variaciones en puesta a punto y pruebas aerodinámicas", ha subrayado.

Finalmente Yasuhisa Arai, responsable de motores en Honda, ha dejado claro que en Australia fueron conservadores con la configuración de su unidad de potencia y que, de cara a Malasia, esperan que todo lo aprendido les permite ser algo más agresivos.

"Siendo Melbourne nuestra primera carrera de la temporada, solo pudimos ofrecer una configuración conservadora en la unidad de potencia, manteniendo un pequeño margen para la potencia máxima. Uno de los monoplazas terminó la carrera y el otro sufrió problemas mecánicos en la unidad de potencia", ha argumentado.

"Sabemos que las condiciones extremas de calor y humedad serán fuertes para la unidad de potencia igual que la necesidad para frenadas y aceleraciones abruptas. En estos momentos no sabemos si vamos a poder tener una configuración un poco menos conservadora que en Melbourne, pero ese es nuestro objetivo principal", ha concluido.