Remi Taffin, el director de operaciones en pista del equipo Renault, cree que sus equipos clientes van a estar más cerca de extraer el máximo potencial de su motor en China de lo que se ha visto en las tres citas anteriores. El Gran Premio de Bahréin fue un baño de realidad bastante duro para la fábrica francesa, que vio como prácticamente casi todos los pilotos que estuvieron delante calzaban motor Mercedes. No obstante, el experimento con nuevos software del motor en los últimos test parece haber dado sus frutos.

"En la prueba en Bahréin hemos probado varios modos nuevos de software que nos harán vernos más cerca de los límites de la unidad de potencia que antes. En las últimas tres carreras hemos estado un poco lejos del límite en el rendimiento, pero estos nuevos modos nos deberían hacer correr más al extremo. Los pilotos deben sentirse mejor en la facilidad de conducción y también nos deberían dar una mayor vida de cada parte".

Taffin ha asegurado que el paquete global que traen en China mejorará el rendimiento de carrera de todos los coches que montan sus motores y que, además, han estado trabajando en la gestión de la energía por vuelta para evolucionar la tracción de los monoplazas, aún sabiendo que uno de los mayores problemas sigue siendo la velocidad punta en las rectas.

"Del mismo modo hemos estado trabajando en la gestión de la energía por vuelta, sobre todo en las curvas lentas. Sabemos que estamos perdiendo en las rectas, pero estas nuevas medidas nos han dado una mayor tracción en las curvas, lo que a su vez debería prolongar la vida útil de los neumáticos y dar una mayor flexibilidad en las estrategias. De hecho, la mayor parte de nuestro trabajo se ha concentrado en los modos y el rendimiento de carrera, ya que es donde creemos que se pueden dar unos pasos más grandes, en lugar de en la clasificación".

Por otra parte, el francés ha reconocido que la de China es una de las carreras más difíciles de este inicio de la temporada. A pesar de las largas rectas, Taffin confía en las mejoras para minimizar los daños y centra su atención en los tramos del circuito de Shanghái donde se deberá recuperar la energía.

"Todas estas mejoras nos deberían poner un poco más cerca de la parte delantera en China. De las cuatro primeras carreras, es una de las más difíciles. La larga recta es , por supuesto, la característica principal del circuito, pero creemos que las medidas adoptadas en las pruebas nos hará menos vulnerables. También hay algunas curvas difíciles de frenar como la primera curva ‘caracol’. Esto y las dos horquillas dan alguna oportunidad para la MGU-K para recuperar la energía en la frenada, pero el enfoque de recuperación de energía se encuentra en la MGU-H y la larga recta", añadió.

"En general, estamos esperando China aunque sabemos que sigue siendo una batalla cuesta arriba, sentimos que hemos dado nuestro paso ahora. Si bien sabemos que los otros están todavía por delante, hemos hecho buenos progresos en las dos últimas carreras, tanto en la fiabilidad como en la facilidad de conducción, especialmente en los modos de carrera”.