Ayer por la noche, Chistian Horner, jefe de Red Bull, fue uno de los invitados al evento que tuvo lugar en el Royal Automobile Club, en el que se daba el pistoletazo de salida oficial a la competición benéfica, Wings for Life Formula One Challenge.

Wings For Life, es una asociación benéfica que se dedica a la investigación y desarrollo de terapias para lesiones medulares. La de Wings for Life Formula One Challenge, es una competición entre empresas, en la que diversos grupos lucharán entre ellos durante los meses de julio y octubre para ver que grupo es el que más dinero consigue recaudar, en favor de la causa benéfica. Red Bull colabora en la iniciativa ofreciendo un interesante paquete de premios.

Los ganadores podrán disfrutar de una sesión en el simulador de Red Bull Racing, y dependiendo de la cantidad que recaude cada empresa, podrán disfrutar de distintos premios. Estos premios van desde una visita guiada a la fabrica de Milton Keynes, para todos aquellos que recauden más de 15.000 libras esterlinas, o la posibilidad de disponer de un chasis de Red Bull para exponerlo en sus empresas para aquellos tres equipos que hayan recaudado más dinero a finales de agosto, cuando la competición pasará por su ecuador.

Christian Horner aprovechó la ocasión para compartir con los presentes unos importantes consejos sobre los beneficios del trabajo en equipo: "No se trata sólo de ser el primer piloto en pasar por la bandera a cuadros, es un trabajo de todo el equipo. En Infiniti Red Bull Racing, hemos sido exitosos porque hemos trabajado en equipo. La comunicación ha sido siempre muy importante y cada detalle cuenta"

Todo el dinero recaudado por los equipos participantes irá directamente destinado a todo tipo de afectados por lesiones medulares, ya que el socio principal de Wings for Life, Red Bull Company Ltd, se hará cargo de todos los gastos de funcionamiento de la campaña.

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