En sus siete temporadas en la Fórmula 1, Red Bull Racing ha sumado cuatro campeonatos mundiales; dos de pilotos y dos de constructores. Tras dos años, 2010 y 2011, siendo el equipo a batir en pista, la escudería de Milton Keynes iniciará el Mundial 2012 con la intención de revalidar sus coronas. Aunque la prohibición de los difusores soplados podría disminuir su competitivo rendimiento, el piloto de Mercedes AMG, Nico Rosberg, les ha señalado como el principal candidato a llevarse las victorias.

En declaraciones a Auto Motor und Sport, el alemán ha asegurado que los austríacos volverán a marcar el ritmo a seguir. "No importa cómo sean las reglas, Red Bull seguirá siendo fuerte. Tienen la habilidad, la estructura y todos los requisitos para seguir siendo los mejores", afirmaba Nico Rosberg en la revista germana.

A pesar de alabar la actuación y experiencia de la escudería de Milton Keynes y señalarlos como el máximo rival a batir en pista, el piloto de Wiesbaden ha asegurado que su equipo, Mercedes, capitaneado por Ross Brawn, está trabajando duro con el objetivo de volver a saborear el champán del podio. "Él sabe lo que necesitamos para ser el mejor equipo", reconocía el campeón de la GP2 Series en 2005.

A poco más de dos meses de iniciar la que será la tercera temporada de las flechas plateadas en la Fórmula 1, Rosberg está seguro que la incorporación de Bob Bell, Geoff Willis y Aldo Costa aumentará, y con creces, la competividad del monoplaza y del equipo. "Ya había mucha gente competente pero no habían crecido juntas de la forma adecuada, no todos estaban en el sitio correcto", señalaba el piloto germano.

"Ese proceso ha tenido lugar ahora. Con Bob Bell, Geoff Willis y Aldo Costa también tenemos a tres nuevas personas punteras a bordo, y creo que muy ligadas a la filosofía de Ross. Se puede notar su ambición", añadía Rosberg a Auto Motor und Sport.

Con la intención de superar a Red Bull e impedir que sumen su tercer mundial consecutivo, Ferrari, McLaren y Mercedes llevan trabajando varios meses para ser la mejor alternativa al dominio de los austríacos.