Max Chilton ha logrado dar el salto de la GP2 a la F1 en 2013. Algo al alcance de muy pocos a día de hoy. Son varios los rumores que apuntan a que el británico de 21 años de edad es uno de los pilotos que más pagan por su asiento en la F1. Se especula que su multimillonario padre tiene firmado un acuerdo con Marussia para comprar acciones del equipo al final de cada temporada que Max dispute al volante de uno de sus monoplazas.

En sus últimas declaraciones a la revista F1 Racing Max Chilton dejó clara su postura respecto a estos rumores. "Puedo decir de forma clara que no es verdad. Tenemos una estructura formada por 30 personas y varias empresas que invierten en mi carrera deportiva. Como contrapartida recibirán un porcentaje de mis ganancias".

Aon, firma que dirije Grahame Chilton, ha sido clave en la carrera deportiva de su otro hijo, Tom. El piloto de 27 años de edad cuenta con una larga trayectoria en el BTCC.

El control del patriarca de la familia Chilton en Carlin pudo ser clave para que Max estuviera en la GP2 la temporada pasada, no obstante, logró buenos resultados que avalan su trayectoria deportiva. En 2012 ganó dos carreras una en Hungría y otra en Singapur, además terminó en cuarta posición del campeonato.