El Pikes Peak Hill climb de 2022 será la edición número 100 de la famosa “Subida a las nubes”, una prueba que después del asfaltado de su carretera ha perdido algo de riesgo, pero no espectaculo. Sobre todo si los coches que se presentan allí son tan llamativos como este Mazda 3 que, así de entrada, promete más de 1.000 CV.

No obstante, no es una creación de la marca, sino del neozelandés Michael Whiddett, un tipo que tiene mucha experiencia con vehículos animados por motores rotativos y que, obviamente, hará uso de sus conocimientos para esta bestia con la que competirá en el Pikes Peak.

Cuatro rotores y propulsión, ¡menudo Mazda 3!

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La información disponible, por ahora, es limitada, pero aún así, muy interesante. El motor que planea usar Whiddett es un Wankel con cuatro rotores, los cuales, alcanzarán los 895 kW, unos 1.217 CV. Esta caballería se enviará al eje trasero, aunque no se ha facilitado información sobre la transmisión, aunque cabría esperar un sistema secuencial de competición con mandos en el volante.

Tan espectacular como la cifra de potencia es su aspecto, que por el momento solo podemos apreciar a través de unas imágenes publicadas en la cuenta de Instagram de Whiddett. Podemos destacar el alerón trasero, cuyo soporte, que sale del difusor, recuerda a las creaciones más radicales vistas en Pikes Peak o incluso a coches como el Opel Astra DTM de los años 90, aunque este tenía un soporte para el alerón menos espectacular.

La parte baja de la carrocería también tiene nuevos elementos aerodinámicos, pensados para potenciar el efecto suelo y mantener la estabilidad a las velocidades que se pueden alcanzar en la Subida a las nubes. No hay datos sobre suspensiones o ruedas, pero el dibujo deja entrever que irá casi arrastrando los bajos por el suelo. También parece tener las salidas de escape por el capó.

Una de las cosas más curiosas, es que mantendrá sus cuatro puertas y contará con cuatro asientos, aunque la normativa del Pike Peak Hill climb no deja llevar pasajeros ni copiloto en los coches.