El responsable jefe de la escudería Red Bull, Christian Horner, ha admitido que es poco probable que Daniil Kvyat vaya a regresar al seno del equipo principal de la marca de bebidas energéticas a corto plazo. Justo antes de Barcelona, el Dr. Helmut Marko, dió a conocer la polémica decisión de enviar, tras el Gran Premio de Rusia, al ruso a la Scudería Toro Rosso.

"No fue fácil convencer a todo el mundo para meterlo en el coche", ha admitido Marko para el diario alemán Auto Bild. En última instancia, sin embargo, la decisión altamente controvertida de Marko, ahora parece correcta, después de que el de 18 años de edad, Max Verstappen, hiciese historia ayer, domingo.

Horner ya compara al joven holandés con Sebastian Vettel, que también comenzó su ascenso de la Fórmula 1 con Red Bull. "No tenemos a ningún nuevo Sebastian", ha insistido Marko. "Él es Max Verstappen", ha añadido.

"¿Que si yo hubiera ganado esa carrera?", ha comentado Kvyat para la agencia de noticias Tass, después de la irrupción histórica de Verstappen. "Nunca lo vamos a saber. Pero sé que mi potencial llega a poder ganar carreras y campeonatos. Simplemente, parece que mi camino será más difícil. Tengo que ser paciente", ha agregado Kvyat.

Pero en Red Bull parecen más que encantados con Verstappen junto a Daniel Ricciardo. "Creo que el retorno de Kvyat es muy poco probable en un futuro cercano", ha opinado Horner, "aunque nunca se puede descartar nada. Él tiene un contrato a largo plazo y continuará ganando experiencia en Toro Rosso, sin estar bajo tanta presión", ha confesado finalmente.