La Fórmula 1 debe decidir entre la cúpula de Red Bull y el 'halo'. Ferrari probó este último en los test de pretemporada y los de Milton Keynes hicieron lo propio en los primeros entrenamientos libres del Gran Premio de Rusia.

El director de carrera de la FIA, Charlie Whiting, ha afirmado que el objetivo era tener todo resuelto "hasta el punto en el que los equipo puedan empezar a diseñar su chasis". Para el 1 de julio este asunto debe estar solucionado, ya que las escuderías empezarán a trabajar en sus monoplazas en vistas a los cambios radicales de la normativa aerodinámica de 2017.

"No sería razonable si no tenemos un camino claro en ese momento. Es sólo una pequeña parte del chasis y no afectará en cosas como en el volumen del combustible y esas grandes cosas, pero es parte de un complejo proceso de diseño. Hay diferentes casos de carga para cada diseño, el 'halo' tiene como una montaña central y la cúpula tiene dos pantallas en los lados sin tener nada por el medio", ha comentado Whiting.

Whiting ha confirmado que tan sólo uno de los dos diseños se implantará en la F1. "Todo el mundo siente que es el camino correcto a seguir. Es cierto, que en el caso de la cúpula de Red Bull, la propia pantalla la realizará una empresa, la misma que suministra a Red Bull y es probable que la necesitemos para abastecer a todo el mundo exactamente con la misma pantalla. La estructura en sí, no la sabemos todavía. A la mayoría de los equipos les gustaría tener un único diseño, ya que puede ser un diseño de una sola pieza o de una estructura de impacto lateral o quizás los equipos puedan hacer un diseño propio del concepto", ha explicado el director de carrera de la F1.

Si ambos diseños "alcanzan el mismo nivel", luego le "corresponderá a la Comisión de la F1 decidir el camino". El siguiente paso que va a dar la FIA en la fase de pruebas se centrará en "el volumen de libertad de la cabeza".

"Ese es el espacio que tiene que quedar libre para dejar movimiento a la cabeza del piloto con el fin de que no entre en contacto con ella. Por el momento, es bastante grande y causa algunos problemas, así que lo que hacemos es pruebas con un maniquí para tratar de simular con mayor precisión cuánto es el espacio que necesita el piloto con el fin de asegurarse que la cabeza del conductor no entre en contacto con ella, ya que ambas estructuras son importantes. Esa es la próxima fase de trabajo y me han dicho que debe completarse en dos semanas", ha explicado el británico.

Whiting espera que Red Bull vuelva a poner a prueba su diseño de la cúpula en los entrenamientos libres del Gran Premio de España y Mónaco. "Esta vez esperamos que hayan encontrado la solución para algún tipo de recubrimiento antireflejos en el interior y son optimistas. Es bastante difícil cuando una se encuentra entre altos edificios, árboles, bajo el sol, todo ese tipo de efectos que es probable que puedan suceder en recorridos como en Mónaco y Monza que tienen estas características naturales. Y también un recubrimiento para el exterior para que repela el agua de la lluvia y evitar que las gotas se peguen en la pantalla. Con el halo no hay estos problemas", ha añadido Whiting, que no ve inconveniente a que los de Maranello y Mercedes decidan hacer más pruebas del 'halo' en futuros GPs.