Fernando Alonso ha reconocido en Suzuka que aún tienen que esperar para saber cómo se adaptará su MP4-30 a las características del trazado aunque ya avisa de dos cosas: no rendirán igual de bien que en Singapur y cree que les irá regular.
"Tenemos que esperar a ver como se adapta Suzuka a nuestro coche, sospecho que regular, no tan mal como Monza o Bélgica y no tan bien como el de Singapur, que tras Mónaco y Hungría fue el tercer mejor para nosotros", ha señalado. "No creo que veamos mejores prestaciones que las de Singapur, ni un resultado que nos haga felices o pueda mostrar la dirección del año que viene".
"Tenemos que concentrarnos en el coche del año que viene, seguir el programa, todo el mundo trabaja 24 horas al día en todas las áreas, prestaciones, fiabilidad, da todo lo que tiene. Todos debemos mejorar, incluso en los procedimientos de fin de semana, desde el piloto hasta el último mecánico. Estaré feliz al final de año si crecemos en este aspecto y también progresamos en el desarrollo de la unidad de potencia y el chasis", ha apuntado el español.
Sobre el bajón de Mercedes en el Gran Premio de Singapur, el asturiano lo tiene claro: "Me sorprendería si están fuera las prestaciones normales de Mercedes a partir de ahora. Llevamos aquí muchos años y sabemos que han sido un segundo más veloz toda la temporada y de repente un segundo y medio peor... Así que es un misterio que posiblemente nunca conozcamos, pero esto es F1, o lo tomas o lo dejas".
En la que es la carrera de casa para Honda, un mal resultado puede doler mucho más que en cualquier otro circuito, aunque el bicampeón afirma que es algo que ya tienen interiorizado en el equipo.
"Ya estaba procesado el tema desde febrero o cuando nos vimos cinco segundos fuera de ritmo en Australia, entonces no esperábamos estar en el podio aquí en Japón, pero así es la cosa ahora, tener un coche más o menos competitivo no está en nuestras manos ahora. Nos lo tomamos como un test, es complicado entender desde el punto de vista del fan, y podemos ser criticados por las prestaciones que damos, pero desde el equipo lo vemos distinto, no podemos dar más de lo que damos", ha confesado.
"Tenemos que aprender lecciones de todo lo que hacemos. El pasado fin de semana en Singapur tuvimos dos abandonos por sobrecalentamiento en la caja de cambios. Los estudiamos, analizamos los problemas con profundidad, buscamos algunas soluciones y mañana las probaremos en los entrenamientos libres", ha proseguido.
"Necesitamos más horas de invierno, más tiempo para cambiar ciertas estructuras del motor, que no estaba para competir en el arranque del campeonato, pero sé que detrás tenemos un grupo de ingenieros inteligentes, muy listos, que en algunos momentos han tenido que ir muy rápido y asumiendo riesgos".
Por último, como no podía ser de otra forma, ha tenido palabras para un Jules Bianchi que el pasado 5 de octubre sufrió un grave accidente en el trazado nipón que, nueve meses después, le hizo perder la batalla.
"Desde luego lo siento muy dentro porque es la primera vez que regresamos al 'paddock' que dejamos el año pasado muy preocupados y desorientados. Es una sensación extraña y trataremos de lograr el mejor resultado como muestra de respeto hacia él. La FIA ha hecho cambios con sentido, como el coche de seguridad virtual, que evita las tentaciones de ir deprisa, y otras cosas que son mejores que en 2014 por lo que si se da otro accidente así supongo que el resultado ya no sería el mismo", ha concluido.
