McLaren quiere recuperar las buenas sensaciones que tuvieron en Mónaco y que perdieron en el pasado Gran Premio de Canadá, en el que ambos pilotos tuvieron que abandonar. A pesar de ello, Fernando Alonso mantiene la cabeza alta y no tira la toalla, aunque sigue con cero puntos en la clasificación general y con una racha de tres retiradas consecutivas, algo que nunca había sentido en su carrera deportiva.

"La de Montreal fue una carrera difícil para todo el equipo; esperábamos una carrera dura dadas las características del circuito, pero obviamente el doble abandono fue especialmente decepcionante. Pero, por supuesto, porque un fin de semana no salgan las cosas como se han planeado, no vamos a darnos por vencidos", asegura contundentemente.

El GP de Austria será una prueba de fuego para la fiabilidad y para las nuevas mejoras del monoplaza. "Seguimos viendo un gran progreso cada fin de semana y esperemos que en Austria sea lo mismo. Nuestro objetivo más importante es la fiabilidad, para así poder estar el mayor tiempo posible en pista con el fin de introducir todas las mejoras que podamos. Se trata de un circuito muy físico con cuatro largas y rápidas curvas, y con fuertes frenadas en las curvas, con lo que será todo un reto para nuestro paquete. Es una pista muy interesante a nivel de pilotaje", añade Alonso.

El Red Bull Ring volvió al calendario la temporada pasada y las sensaciones no pudieron ser mejores. "El Gran Premio de Austria del año pasado fue un gran evento y estoy deseando que llegue la carrera de este fin de semana. Es un circuito de frenada-arranque así que será un reto interesante; seguiremos empujando para asegurarnos de sacarle todo el partido que podamos al fin de semana", se muestra optimista el asturiano.

"Spielberg es un bonito sitio para un Gran Premio y volver allí la temporada pasada, después de once años, fue una gran experiencia. Sigue siendo el gran circuito que fue y cuenta con unas cuantas opciones de adelantamiento que lo hacen aún más divertido. Ya hemos dejado atrás la última carrera y tengo muchas ganas de salir a pista, pelear duro con nuestros competidores más cercanos y, esperemos, divertirme", concluye Alonso.

El Gran Premio de Canadá fue todo un mazazo para el equipo McLaren, pero Jenson Button asegura que ya están completamente recuperados y afrontan el GP de Austria con optimismo. "En los últimos días nos hemos recuperado de Montreal y ya estamos firmemente mirando hace adelante, hacia nuestro próximo reto. Como equipo, se nos mide básicamente por cómo acabamos en un domingo por la tarde, algo que no toma en cuenta el progreso que hemos hecho entre bastidores, o durante los libres o la clasificación en los días previos a la carrera, con lo que a veces puede ser difícil mirar los aspectos positivos después de un duro gran premio", opina el británico.

Button admite que el duro trabajo tendrá sus frutos y espera que en Austria se demuestre otro gran paso hacia delante. "Es importante que no nos olvidemos de lo lejos que hemos llegado. Sí, que los dos coches abandonaran la carrera no era el resultado por el que hemos trabajado tan duro, pero estamos centrados en el progreso que seguimos haciendo y en las mejoras que ya hemos hecho hasta el momento. En el equipo aún hay una fe enorme y seguimos empujando en el desarrollo de cada área desde Woking y Sakura", confiesa el piloto de McLaren.

El Red Bull Ring es un trazado que gusta a la mayoría de pilotos, pero sobre todo a aquellos que pudieron experimentarlo en el pasado. "El Gran Premio de Austria del año pasado fue un gran éxito, y para los pocos pilotos que corrimos aquí antes de 2003, está considerado sin duda como uno de esos 'miniclásicos': no es tan complejo en cuanto a su configuración, pero muy divertido para pilotar. En teoría, Austria no le va a ir bien a las características de nuestro coche, pero tengo muchas ganas de disfrutar de una buena carrera allí y de empujar para progresar cada vez más en cada sesión", admite Button.

"A pesar de tratarse de un diseño relativamente simple, Spielberg es un circuito divertido que suele dejar grandes carreras. En 2014 vino mucha gente y hubo un gran ambiente, y espero que podamos volver a ofrecer un buen espectáculo a los aficionados este año", concluye el piloto inglés.

Por su parte, el director deportivo de McLaren, Eric Boullier, teme por las sanciones que puedan llegar en breve por los continuos cambios en su unidad de potencia. "La fiabilidad ha sido un problema clave durante nuestro desarrollo, sobre todo en el coche de Fernando. Se trata de un elemento crucial dentro de un fin de semana de carreras que necesitamos mejorar para poder seguir progresando. Estamos en el camino correcto pero al igual que otros equipos, estamos entrando en una fase de la temporada en la que los fallos pueden acabar en sanciones. Pero las reglas son las que son y son las mismas para todos", lamenta el francés.

Boullier quiere olvidar cuanto antes la pesadilla de Montreal y centrarse en lo que esperan que sea un Gran Premio más que complicado. "No podemos negar que el abandono de los dos coches en Montreal fue un duro golpe, pero, sin bajar la cabeza, hemos fijado rápidamente nuestra atención en Austria. Lo que hay que recordar es que, pese a la decepción de la última carrera, seguimos aprendiendo y mejorando, con lo que no tenemos que estar demasiado desanimados; al contrario, tenemos que seguir firmemente centrados en el camino que tenemos por delante", anima a su equipo.

"En lo que al rendimiento se refiere, esperamos que el Gran Premio de Austria sea otro fin de semana complicado, puesto que el circuito cuenta con fuertes frenadas después de alcanzar altas velocidades y características similares a las de Montreal en términos de frenada-arranque", añade Boullier.

En Honda están preocupados porque las características del circuito afecten a la fiabilidad del MP4-30, pero Yasuhisa Arai espera que las nuevas mejoras contrarresten estos problemas. "El Red Bull Ringes otro trazado de potencia con largas rectas parecido al de Canadá, lo que significa que va a ser duro con las unidades de potencia. Sabemos que nuestros resultados de Canadá fueron decepcionantes, con lo que estamos trabajando duro para analizar, corregir y mitigar los problemas de cara a Austria", explica el japonés.

"La elevada altitud de la pista afectará también al rendimiento de la unidad de potencia, y el monoplaza en su conjunto requerirá de una buena aerodinámica y carga aerodinámica. Las nuevas mejoras en el sistema ERS hechas en Canadá se han realizado para contrarrestar esto, y se adaptarán a las nuevas mejoras aerodinámicas y de chasis previstas para Austria", agrega Arai.