Max Mosley, sucedido como presidente de la FIA por Jean Todt, ve complicado que se lleve a cabo la sugerencia de Red Bull de instaurar una mayor igualdad en la parrilla para evitar el dominio absoluto de Mercedes en la actualidad.

El británico tiene claro que solo la unanimidad podría forzar un cambio y no ve factible que eso ocurra ahora mismo, por lo que insta a la escuderia austríaca a vivir con ello y a trabajar para recuperarse.

"Dudo mucho que vayan a estar todos de acuerdo", ha dicho el expiloto de 74 años de edad a The Times. "Todos ellos han firmado el acuerdo y tienen que vivir con ello".

Además, Mosley ha mandado un mensaje claro a Red Bull al afirmar que cualquier equipo se queja de las normas cuando ve que un competidor es excesivamente dominante.

"Ellos nunca se quejan de dominio cuando están dominando, sólo lo hacen cuando están en el lado contrario", ha insistido. "El dominio está en la naturaleza de este deporte, que se remonta a mediados de la década de 1950 cuando Mercedes dominó entonces", ha confesado.

Sin embargo, el expresidente de la FIA también culpa a los competidores de la Fórmula 1 de que la situación actual sea esta

"Los equipos han gastado mucho y los fabricantes están cobrando demasiado por sus motores", dijo al Times.

"Ahora todo apunta a que un equipo va a dominar el deporte durante dos o tres años, y no hay nada que se pueda hacer al respecto, a menos que todos están de acuerdo. Y eso no va a suceder", ha finalizado.