Irónico que un accidente de esquí haya dejado a un piloto como Michael Schumacher, que arriesgó su vida por más de 20 años en los coches más veloces del mundo en la categoría reina, tan afectado por sus posteriores lesiones cerebrales.
La situación es tan delicada que ni su mánager, Sabine Kehm, puede datar su recuperación. Aunque sí ha podido agradecer la ayuda de todo el mundo respetando la privacidad y parando los rumores sobre el heptacampeón del mundo. "La gente ha entendido que toda la situación necesita calma y paciencia", indicaba Kehm hablando con la RTL alemana. "Así que mucha gente ha entendido que la privacidad es muy importante en este momento".
Casi un año ha pasado desde que Schumi sufriera dicho accidente -a finales de diciembre de 2013- pero aún no se sabe a qué punto llega la gravedad de su lesión cerebral. Todo queda en una especulación por ver si el alemán puede caminar o hablar, aunque Kehm asegura que está "haciendo el progreso apropiado por la severidad de sus lesiones". Pero, ¿cuándo podríamos decir que Michael está totalmente recuperado?: "Eso simplemente no es posible en esta situación. Será un proceso largo y difícil", concluyó Kehm.
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