"Él entendió nuestra situación y nos dijo que si su salida podía ayudar a 100 puestos de trabajo, entonces él iba a dejar lugar para otro piloto", asegura Pat Symonds sobre Timo Glock. Desprovisto de muchos patrocinadores, el nuevo Marussia MR02 de este año será pilotado por los acaudalados Max Chilton y Luiz Razia, éste último quién ha reemplazado a Glock en el último minuto.

Hablando del alemán, Symonds dice: "Es un excelente piloto, con su experiencia y retroalimentación ayudó mucho con el desarrollo del coche". Sin embargo, explica que Glock se fue porque Marussia necesita "cada millón", como les ocurre a todos los equipos de la parte inferior de la tabla. "Para Red Bull, un millón tiene poco efecto. Para nosotros es diferente", insiste Symonds en Auto Motor und Sport.

Así, desde Marussia admiten abiertamente que cortaron la relación con el alemán porque necesitaban a un piloto que llevara un patrocinio significativo. No obstante, Symonds lamenta que Glock tuviera que irse. "Tengo que quitarme el sombrero ante Timo", ha asegurado el británico en referencia al piloto, que ha pasado al DTM con BMW. Y explica por qué: "Era excelente en condiciones difíciles. En una pista seca, fue de tres a cinco décimas por delante de (Charles) Pic (en 2012). Sin embargo, en condiciones difíciles, como la última carrera en Brasil, fue un segundo y medio".

Martin Whitmarsh, jefe de equipo de McLaren, quien esta semana admitió haber intentado sin éxito ayudar a Heikki Kovalainen a permanecer en la Fórmula 1, dijo que la situación actual de los ‘pilotos de pago’ es "una lástima" para este deporte. "Para algunos equipos, es difícil sobrevivir, eso es seguro", reconoce. E insiste: "Es emocionante para esos chicos que pueden permitírselo, pero en mi opinión esto es lo más alto del deporte de motor", señalaba el británico en declaraciones recogidas por la publicación holandesa Formule1.