En la tradición japonesa es fundamental respetar la armonía en todos los actos y obras, sean más cotidianos o más excepcionales. Y en dicha armonía, el aire que nos rodea tiene mucho que decir.
No es de extrañar, por tanto, que en los últimos tiempos los automóviles japoneses se tomen la aerodinámica casi como una obra de arte, donde la belleza y la eficiencia se funden sin que tengamos muy claro dónde empieza y acaba cada concepto.
Precisamente ese suave y, hasta cierto punto, lujoso dinamismo del aire es lo que Lexus ha querido plasmar en su última instalación artística, titulada 'Shaped by Air' y que ha estado recientemente expuesta en Miami.
Líneas que se dejan llevar por el viento
Creada por la artista y arquitecta neoyorquina Suchi Reddy, 'Shaped by Air' muestra la silueta del prototipo eléctrico Lexus Electrified Sport, reducida a sus trazos más básicos y flotando a merced de un viento representado por grandes hojas verdes que transmiten sensación de movimiento.
De este modo se transmite la idea de un 'aire' que, juguetón, juega a ser diseñador de coches por un día manipulando las nubes para concebir un superdeportivo que, cuando eche a rodar, no cortará el viento sino que lo acariciará a su paso.
Otra característica interesante de la obra es que está realizada con materiales 'post consumo', es decir, que ya han cumplido su primer propósito útil. Así los 'jirones' que componen el coche son de metal perforado mientras que las 'hojas' se presentan en chapa.
Alojada en el jardín de esculturas del Instituto de Arte contemporáneo de Miami (EE UU), la instalación de Lexus está pensada para contemplarse y reflexionar sentados enfrente de ella a poca distancia, gracias a unos bancos cuyo diseño se inspira en el alerón posterior del Electrified Sport y que, además, incorporan cargadores inalámbricos con energía solar para smartphones.
Sea como fuere, nada mejor que la visión de la propia Suchi Reddy para comprender su creación. Así describió la artista su 'Shaped by Air' en el momento de su presentación: "Shaped by Air consigue dar vida al patio valiéndose de las formas metálicas, la bruma y la luz para crear una instalación etérea que refleja y se transforma con los elementos naturales del jardín de esculturas, desdibujando los límites entre el arte y el diseño".
