Cuando uno piensa en un coche para devorar el cuarto de milla es inevitable pensar en un Dodge Challenger Demon, y es que sus 852 CV y su puesta a punto específica para drag races lo convierten en un arma infalible para esta disciplina. Pero cuando una marca como Dodge se une a un aliado como Mopar la cosa puede mejorar aún más, Mucho más.

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Decimos esto porque hace algo más de un año FCA de la mano de su famosa división de piezas de personalización lanzaba el salvaje motor Hellephant, un propulsor V8 Hemi específicamente modificado para ofrecer la friolera de 1.000 CV de potencia. Un motor que rápidamente se convirtió en un objeto de deseo para los amantes de los Challenger.

El elefante en su hábitat natural

Ahora ese motor se ha puesto por primera vez a prueba en el cuarto de milla con este Challenger SRT Demon que AJ Berge y Hemituner Performance han soltado en la pista de Atco Dragway. Y el resultado es tal que solo se puede comprender viendo este vídeo, donde podemos verlo salir disparado.

Además de contar con el famoso motor Hellephant este Demon también usa unas nuevas ruedas especiales para agarrarlo aún más al asfalto. Sin embargo este Challenger se las apaña para seguir haciendo pequeños caballitos debido a la inmensa cantidad de potencia de su tren motriz.

Por debajo de los 10 segundos

El resultado de este test fue una marca de 9,278 segundos en el cuarto de milla con una velocidad de 241 km/h, lo que se traduce en una mejora de medio segundo respecto a un Dodge Demon de serie si bien hay un modelo que por tan solo unas décimas sigue superándole, y no es otro que el Dodge Challenger Hellcat Redeye de 1.000 CV de Hennessey. En cualquier caso para tratarse de un coche con componentes "oficiales" de FCA hay que reconocer que tiene un mérito inmenso. ¿Donde estará la cima de este modelo?

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Antonio Ramos Ochoa

Especializado en el mundo del motor, la competición y la tecnología, Antonio Ramos Ochoa es redactor de Car and Driver. Se comenta que antes de bajarse del carro ya iba diciendo el nombre de los coches que iba viendo por la calle. Unos cuantos años después sigue hablando de una de sus pasiones aquí. Aficionado al Motorsport, el cine, videojuegos y la historia, incluso se desfoga de vez en cuando al volante de un kart o un simulador.