Con la llegada del nuevo año el fabricante de automóviles Mini ha decidido actualizar su gama de productos con una serie de cambios a nivel estético y tecnológico, con un equipamiento de serie ampliado y una gama de motores optimizados a los estándares de emisiones actuales. Estas modificaciones afectan a los modelos de 3 y 5 puertas, además del Cabrio, incluyendo las versiones normales, deportivas y eléctricas.
Techo multitono
Si comenzamos por la parte estética nos encontramos con que estos automóviles mencionados ahora cuentan con una parrilla cuyo contorno hexagonal ocupa mucho más espacio, luces de posición que dejan paso a unas entradas de aire verticales, franja central del paragolpes del color de la carrocería, así como nuevos contornos de los pasos de rueda, intermitentes laterales rediseñados con tecnología led y una luz antiniebla trasera integrada en el faldón posterior. Además, los Mini de 3 y 5 puertas pueden presumir de un innovador techo multitono que combina tres colores diferentes.
Con respecto al interior, aparecen unos asientos deportivos con color Light Chequered, nuevas tapicerías, difusores de aire rediseñados y empotrados, además de molduras novedosas. La consola central también ha sufrido cambios y lo mismo ocurre con el característico panel central de instrumentos, mientras que la pantalla táctil a color de 8,8 pulgadas, los botones de acceso directo sensibles al tacto y las superficies en Piano Black high-gloss son ahora elementos de serie. Tampoco podemos olvidarnos del nuevo volante deportivo de cuero, calefactado por primera vez, y un cuadro de instrumentos digital de 5 pulgadas.
Motores de tres y cuatro cilindros
En la parte mecánica los grandes protagonistas son unos propulsores de gasolina de tres o cuatro cilindros que incluyen un turbocompresor integrado en el colector de escape, inyección directa de combustible y distribución variable. Los motores tricilíndricos cubican 1.5 litros y desarrollan 102 y 136 CV, mientras que los tetracilíndricos desplazan 2.0 litros y ofrecen 178 o 231 caballos de potencia. Todos ellos van asociados de serie a una caja de cambios manual de seis velocidades, aunque de forma opcional –a excepción de los motores de entrada– se puede equipar una transmisión automática Steptronic de doble embrague y siete relaciones (Steptronic de 8 marchas para los JCW).
El modelo eléctrico, por su parte, ofrece 184 caballos de potencia y su batería de iones de litio ofrece una capacidad bruta de 32,6 kWh, lo que facilita una autonomía de entre 203 y 234 kilómetros según el protocolo WLTP. Esta versión ecológica es capaz de alcanzar los 100 km/h en 7,3 segundos y su velocidad máxima está limitada a 150 km/h.
En palabras de Bernd Körber, director de Mini: "Con esta actualización, el Mini ha alcanzado un nivel de madurez que lo hace más excepcional que nunca en el segmento de los coches pequeños en lo que respecta a diseño, a esencia y a calidad premium. El Mini es el pionero que se distingue de la multitud y sigue reinventándose una y otra vez".
Suspensión adaptativa
A nivel de chasis lo más destacado es la presencia, por primera vez, de una suspensión adaptativa que logra, según la marca, un equilibrio notablemente optimizado entre la deportividad y el confort de marcha gracias a la utilización de una amortiguación continua de frecuencia selectiva. Esta disponible en todas las versiones, salvo en los Mini One y Mini Cooper SE.
En lo referido a los asistentes y ayudas a la conducción, el utilitario británico ahora se puede beneficiar del sistema de alerta de cambio involuntario de carril y el control de crucero adaptativo con función Stop & Go. Las primeras unidades llegarán a los concesionarios en el mes de marzo.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
