Desde hace un tiempo la marca checa Skoda decidió apartar de nuestro mercado, y de otros en la Europa más occidental, al modelo que se situaba por debajo del Octavia, es decir, el Rapid. Su vida comercial no se terminó, ni mucho menos, pero acabó relegado a otro tipo de mercados como el de China y Rusia. Ahora, acabamos de conocer su gran apuesta para conquistar el territorio asiático.
Renovación total
El fabricante del Grupo Volkswagen quiere seguir apostando por esta berlina de precio asequible y para ello ha decidido actualizar por completo el Skoda Rapid. A decir verdad, no estamos ante una nueva generación ya que las imágenes que tenemos en pantalla hacen referencia a un modelo que todavía sigue asentándose sobre la plataforma de la anterior generación del Polo, en lugar de la MQB A0 del Scala.
Con respecto a este último modelo, no hace faltar fijarse con mucho detalle en la estética del renovado Rapid para darse cuenta de su gran influencia. Y es que tanto la parte delantera como trasera recurren a unos grupos ópticos muy similares a los del compacto, acompañados de unos paragolpes rediseñados, una parrilla en forma hexagonal y un pequeño spoiler en la parte trasera. El resto del conjunto es muy parecido al del modelo saliente.
Con respecto al interior, los cambios introducidos por la marca son bastante notables, principalmente en el apartado tecnológico. El cuadro de instrumentos es completamente digital y el sistema de infoentretenimiento está liderado por una pantalla táctil de hasta 8 pulgadas, situada en la parte central del salpicadero. También aparecen otros detalles novedosos como unas tomas USB, un volante calefactable y unos asientos ergonómicos, entre otras cosas.
Bloques de gasolina
En el apartado mecánico serán dos los únicos protagonistas, un par de propulsores de gasolina que recurren a la aspiración natural para el más asequible, y a la turboalimentación para el más prestacional. En este sentido, el primero de ellos es un 1.6 MPI con potencias de 90 y 110 caballos, mientras que el segundo es un 1.4 TSI de 125 CV. Ambos pueden ir asociados a una caja de cambios manual de cinco o seis velocidades, así como una automática de doble embrague y siete velocidades. Esta última solo puede acoplarse al TSI.
El Skoda Rapid 2020 se construirá en la planta que tiene el Grupo Volkswagen en Kaluga, Rusia. Las primeras unidades llegarán a los concesionarios en el primer cuatrimestre de 2020, con un precio base de unos 11.500 euros. Más adelante llegará a otros mercados como el de la India o China.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
