El Strati es el primer coche creado por una impresora 3D y funciona perfectamente. Los responsables de su construcción son los chicos de Local Motors, una compañía norteamericana con sede en Arizona (EE.UU) que ha presentado su primer trabajo completo estos días.
Según han detallado sus propios técnicos, para la fabricación del Strati se han raquerido hasta 44 horas de impresión sólo para terminar la carrocería, a las que hay que añadir otras dos de ensamblaje de su mecánica. Sin embargo, en la compañía aseguran que afinando los procesos de fabricación podrían tardar unas 20 horas de media, para la confección de cada vehículo.
La impresora 3D de la que ha surgido este vehículo es especial, tanto que sólo existen dos similares en Estados Unidos –precisa el fabricante– y es capaz de moldear las formas de un vehículo como este con un material sintético reforzado con fibra de carbono. Por último, un equipo de montaje se encarga de añadir los elementos móviles, tales como las ruedas.
Por lo que respecta a su mecánica, el Strati cuenta con un motor eléctrico tomado directamente del Renault Twizy, con una potencia de 17 caballos, alimentado por una batería de tipo ión-litio. Además, tanto el volante como los mandos y la instrumentación también son calcados a los del Renault.
Aunque el Strati ha sido concebido como un modelo único y experimental, Local Motors asegura que en apenas una semana ha pasado de ser un diseño a una realidad, lo que prueba las posibilidades de esta nueva tecnología, que permitiría a los clientes elegir distintas opciones de personalización para su vehículo nuevo con un coste mínimo.
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