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Todavía recuerdo el debut del Panamera; un Porsche completamente distinto a lo que habíamos visto hasta la fecha y que como toda berlina de lujo que se precie, incluía ya en 2009 un sinfín de elementos de confort, un pesado paquete tecnológico y hasta una versión híbrida muy eficiente. Todo ello combinado, como no podía ser de otra forma, con la mayor de las exigencias a nivel de calidad de fabricación y dinamismo para un turismo de más de cinco metros de largo y dos toneladas de peso.
Cuatro años después, la segunda generación elevó claramente el listón, añadiendo versiones híbridas de altísimo rendimiento y camuflando de forma extraordinaria su envergadura incluso en los tramos más revirados para posicionarse como el automóvil más deportivo de su clase. Casi una década después de todo aquello, parecía imposible mejorar la receta pero en Stuttgart lo han vuelto a hacer con un ingrediente inédito llamado Porsche Active Ride y con una serie de mejoras añadidas que han terminado por aderezar el plato estrella.
¿En qué cambia el Porsche Panamera 2024?
El diseño del nuevo Porsche Panamera evoluciona conservando la esencia de las anteriores generaciones, pero añadiendo rasgos muy distintivos, importados del último 911. En vivo, las marcadas hendiduras del capó, los pasos de rueda más abultados, las llantas sobredimensionadas y sobre todo, unas entradas de aire más grandes, resaltan en un frontal más ancho, a juego con una trasera igualmente más rotunda, con unos grupos ópticos se extienden por toda su parte superior y con un spoiler que se despliega en dos partes de forma automática.
El Porsche Driver Experience, al detalle
De puertas para adentro, lo más destacado es la presencia de un selector de marchas ubicado justo a la derecha del volante que reemplaza a la palanca tradicional y por supuesto el denominado Porsche Driver Experience. Este cockpit combina tres pantallas: una unidad de 12,6 pulgadas para el cuadro de instrumentos y dos pantallas táctiles de 10,9 pulgadas situadas en el centro y el lado del copiloto, esta última opcional. No obstante, como en todo Porsche que se precie, los cambios más interesantes, son los que se aprecian tras el volante.
Test de conducción del nuevo Panamera en circuito
El circuito de Monteblanco, en Huelva, es una pista muy técnica en sus distintas configuraciones y resultó un escenario perfecto para probar el Panamera tanto en su configuración deportiva, como en los modos de conducción orientados al confort que son en realidad, los que permiten comprobar los avances del Porsche Active Ride o lo que es lo mismo, una suspensión que hace magia.
En Sport Plus, el Panamera se pega al asfalto. Con un centro de gravedad más bajo y por supuesto, una mayor rigidez, el coche va sobre raíles. Hasta aquí, todo más o menos normal. Pero cuando pasas a los modos de conducción híbrida o eléctrica, descubres una experiencia de conducción única.
Llegas a final de recta donde empiezas a frenar a unos 170 km/h, el coche no se mueve en absoluto. Frenadas intensas, en una pista de carreras y el chasis logra mitigar las fuerzas G habituales. Así, entras en la zona de curvas rápidas enlazadas y tienes la sensación de que la curva no es tan pronunciada. Aceleras a fondo en la salida y en la siguiente frenada casi te la pasas porque no tienes la sensación de haber acelerado tanto. Es una sensación muy particular porque se aprecian movimientos mínimos de la suspensión que son contrarios a los es que esperas. Es sencillamente alucinante y no hay nada igual en el mercado.
La oferta mecánica la componen un V6 de 2.9 litros turbo con 353 caballos de potencia y 500 Nm de par máximo, que ha ganado 23 CV y 50 Nm respecto a su antecesor y que está disponible tanto con tracción trasera, como con la integral. Las versiones con este motor responden a las denominaciones Panamera y Panamera 4. Por encima de éstas se ubican los Panamera 4 E-Hybrid y 4 S E-Hybrid que llevan el mismo motor V6 pero hibridado para alcanzar los 470 y 544 caballos, respectivamente. Y por encima de todas, al menos de momento, destaca el Panamera Turbo E-Hybrid que asocia el nuevo V8 biturbo de 4.0 un eléctrico de 190 CV y por supuesto a una transmisión PDK que reparte sus 680 caballos de potencia y 930 Nm de par máximo de este conjunto híbrido, a las 4 ruedas. Su rendimiento en circuito desde luego, no decepciona en absoluto.
Porsche Panamera 2024 - fotos
El sistema eléctrico de los E-Hybrid incluye una batería de 21,8 kWh, que según Porsche se puede recargar en poco más de dos horas a través de un cargador a bordo más potente de 11 kW, y un motor eléctrico completamente nuevo que ofrece 140 kW (190 CV) y 450 Nm de par. El aumento de la capacidad permite una autonomía eléctrica de hasta 96 kilómetros en el ciclo combinado WLTP.
Precio, conclusiones y opinión
Lo que tenemos es una berlina todavía más sofisticada, todavía más rápida, todavía más precisa. Con un potencial de los que se dejan notar en cualquier circunstancia y no hay nada tan preciso y tan efectivo como un Panamera Turbo E-Hybrid en estos momentos.
Disponible desde los 125.102 euros y desde los 127.829 con mecánica híbrida, está claro que el Panamera de tercera generación es el más confortable y eficaz de todos y desde luego, el único turismo al que puedes acceder como si fuera un SUV.
- A favor: Acceso al habitáculo. Nivel de confort. Calidad de fabricación y tecnología. Sensaciones de conducción únicas.
- En contra: Maniobrabilidad en ciudad. Peso en orden de marcha del híbrido. Precio de las versiones más equipadas.
