Los comisarios del Gran Premio de España fueron más permisivos de lo habitual. La carrera arrancó de manera accidentada y continuó con más lances entre pilotos que, en otras ocasiones, podrían haber terminado con sanción.

Así, el accidente protagonizado por Max Verstappen y Kimi Räikkönen, el cual supuso el abandono para ambos pilotos, ni siquiera fue investigado por los comisarios, aunque sí entraría a estudio una vez decidieron involucrar a Valtteri Bottas en la acción. Sin embargo, la decisión terminó sin castigó para el piloto finés.

Tampoco optaron por castigar a Felipe Massa después de que el brasileño no dejase espacio a Fernando Alonso a la salida de la curva dos una vez se apagó el semáforo. Sin embargo, al tratarse de una salida tan accidentada, los comisarios no creyeron que hubiese intencionalidad por parte del piloto de Williams e, incluso, Alonso reconocía al término de la prueba que no consideraba que la acción mereciese sanción.

Del mismo modo, pese a que Kevin Magnussen llamaba “loco” a Carlos Sainz por tratar de adelantarlo por la hierba tras realizar ambos, al mismo tiempo, las paradas en boxes, los comisarios decidieron no entrar a valorar la acción del español, ya que no consideraron que hubiese algo punible.

Sin embargo, no sucedió lo mismo con Stoffel Vandoorne, quien ha sido sancionado con tres posiciones en la parrilla del próximo GP de Mónaco, tras provocar una colisión con Massa en la curva 1, lo que provocó el abandono del piloto belga.