La temporada 2016 de Fórmula 1 arranca la próxima semana en Australia y allí hará su debut oficial el equipo Haas en un fin de semana de Gran Premio.
Tras una pretemporada positiva en líneas generales aunque con los problemas de fiabilidad habituales por la juventud del proyecto, la escudería norteamericana llega Melbourne con el objetivo de terminar la carrera con los dos coches y, por qué no, puntuar.
"La primera semana fue muy bien. Hubo algunas buenas sorpresas, fue un poco menos divertido pero, en general, el equipo ha sido impresionante", ha dicho Romain Grosjean, quien arranca un nuevo proyecto tras salir del equipo Lotus.
"El mundo de la Fórmula 1 se ha quedado sorprendido por el hecho de que llegásemos a Barcelona y saliéramos a hacer algunas vueltas buenas. El coche se comportaba bien y parece como si todo el mundo hubiera trabajado junto desde hace mucho tiempo. El espíritu del equipo es muy bueno. Hay un montón de experiencia y todo el mundo escucha a los demás, lo que hace que sea más agradable. Estoy muy contento con las pruebas de invierno y con la forma en que llegamos a Australia".
En este sentido, Grosjean no se marca objetivos claros para la primera carrera pero avisa que quieren llegar a los puntos muy pronto
"El coche es bueno, con una muy buena línea de base. Se comportaba muy parecido al simulador, lo cual es bueno. Probablemente nos ayudará a trabajar dos veces más rápido. Me sentí muy cómodo desde el principio en el coche. Hay algunas cosas que podemos adaptar y mejorar, pero, en general, estoy muy contento con la forma en que el VF-16 ha estado funcionando. Es pronto para marcarse objetivos, pero queremos estar en los puntos lo antes posible".
El francés está emocionado por el nuevo reto y cree que el buen ambiente que hay dentro del equipo y su espíritu de trabajo les hará crecer mucho más rápido
"Ha sido una experiencia única en la vida, el ser parte de un nuevo equipo y el conducir, por primera vez, el coche fuera del garaje, especialmente al ser Haas un equipo americano. Ha sido una experiencia única. Es bueno poder dar consejos y contar tus sensaciones. Todos los ingenieros han estado escuchando mucho. Todos somos una pieza importante del rompecabezas y todos trataban de hacer lo mejor posible. El espíritu de equipo es importante en un deporte como la Fórmula 1".
Por su parte, Esteban Gutiérrez regresa a la parrilla tras un año de ausencia y también ha terminado la pretemporada con buenas sensaciones que le hacen llegar optimista a la primera carrera del año.
"En general, ha ido mejor de lo esperado. Al ser un nuevo equipo, logramos poner el coche en pista y hacer una muy buena cantidad de vueltas el primer día", ha comentado el mexicano. "Lo más importante es que llegamos a conocer el coche, lo cual era el mayor interrogante tras meses de preparación. Cuando vi el coche por primera vez en el papel, me imaginaba como se sentiría. Finalmente, llegué a Barcelona, salí de mi vuelta de instalación y, tras dos o tres curvas, ya podía decir algo del monoplaza. Fue un momento muy interesante".
"Es un honor conducir el coche. Es muy agradable. He tenido coches en el pasado que eran difíciles de configurar con precisión para obtener una buena sensación acerca de dónde se puede anticipar y de dónde se puede empujar al límite. El VF-16 me dio enseguida buenas sensaciones. Como base, eso es siempre una buena señal. Es un gran coche. Nuestro objetivo es conseguir puntos. Es bastante ambicioso para ser un equipo nuevo, pero eso es hacia lo que nos hemos orientado y hemos trabajado muy duro para lograrlo", ha proseguido.
El de Monterrey, como su compañero Grosjean, está muy contento de formar parte de este proyecto que arranca su andadura en la Fórmula 1, al que espera ayudar desde su experiencia dentro del Gran Circo
"Ha sido una experiencia diferente el haber sido parte de la integración del equipo desde que comenzaron las conversaciones entre Gene Haas y Guenther Steiner en verano. Siempre he tratado de ayudar con mi experiencia y de ser parte del desarrollo del coche, para ser consciente del desarrollo del coche y para estar cerca del equipo y de los diseñadores, por lo que he podido prepararme mejor. Es una nueva aventura y es un honor formar parte de ella".
Finalmente Günther Steiner, director del equipo, ha desgranado las sensaciones de la pretemporada, que resume en que llegan tan preparados como podrían a Australia y allí darán su máximo.
"Los cuatro primeros días (de test) fueron muy buenos. Progresamos mucho y estábamos en forma", ha confesado. "Luego vino la segunda semana de test. En el primer y en el segundo día, sólo dimos un par de vueltas, en parte porque tuvimos un problema de combustible con la electrónica y el turbocompresor. Al tercer día, tuvimos un problema con nuestro sistema de frenado. Nuestros chicos se encargaron de ello durante la noche. El último día, tuvimos un muy buen día de test y estuvimos de vuelta a donde lo habíamos dejado la primera semana. Fue como una montaña rusa. Por ahora, estamos tan preparados como podríamos para Australia, pero nunca se está lo suficientemente listo. No importa, vamos a dar el máximo", ha continuado antes de marcarse como objetivo terminar la carrera con ambos coches.
"Nuestro objetivo es que los dos coches terminen, para demostrar que podemos competir y estar orgullosos de lo que estamos haciendo. El objetivo fue determinar la estrategia de neumáticos (para Australia) durante los test, pero es muy difícil porque las condiciones serán diferentes en Australia. Elegimos los tres tipos diferentes de neumáticos en base a los comentarios de los miembros del equipo que han trabajado en Fórmula 1 desde hace mucho tiempo. Cómo se usan y cómo se comportan lo determinaremos a lo largo de los entrenamientos libres en Australia. La decisión sobre qué estrategia de neumáticos usaremos en Australia la tomaremos antes de la clasificación", ha concluido.
