Monza, el Tempo de la Velocidad, exige a los equipos tener una unidad de potencia que se pueda exprimir al máximo y ofrezca competitividad si quieren lograr un buen resultado, algo que Renault no está ofreciendo a Red Bull.

Por eso mismo, la escudería austríaca ha decidido penalizar con 10 puestos en la parrilla de salida del Gran Premio de Italia cambiando los motores en los monoplazas de Daniel Ricciardo y Daniil Kvyat, conscientes de que sufrirían en esta carrera tal y como ha confirmado Christian Horner.

"Hemos decidido penalizar este fin de semana con ambos coches por usar el sexto motor", ha dicho a Autosport. "Nos hemos quedado sin kilometraje en los motores que tenemos y necesitamos hacer lo que podamos para llegar a final de año. Hemos decidido hacerlo en Monza de forma táctica porque es un circuito donde vas al máximo el 75% de la vuelta, por lo que obviamente no iba a ser nuestro circuito más fuerte del año", ha concluido.