El cambio de ciclo que se abrió en la F1 con la temporada anterior ha traído unos resultados que no han gustado a casi nadie. Unos monoplazas faltos de rendimiento y de atractivo, una lucha excesivamente determinada a favor de Mercedes, y en líneas generales, una falta de espectacularidad en los equipos y en la competición está generando una gran decepción a los aficionados, que ven como cada se deteriora el espectáculo. Por ello, los dirigentes están buscando nuevas líneas de actuación que permitan traer una mayor espectacularidad a la pista, que haga que la categoría vuelva a gustar.
Daniil Kvyat no está de acuerdo con todo lo que se está comentando, en especial sobre la supuesta facilidad con la que se pueden conducir los actuales monoplazas: "El espectáculo es amplio, no importa lo que las críticas digan. He oído muchos comentarios sobre ello, pero creo que no son conscientes de lo que estamos haciendo. Me gustaría verles sentados en uno de los coches y ver de lo que son capaces".
Por su parte, Nico Hulkenberg es de la misma opinión de Kvyat, e indica que la F1 sigue siendo atractiva: "No soy uno de los grandes críticos de la F1. Para mí todavía es la primera clase, así como los mejores coches y los más rápidos que puedes conducir hoy, todavía hay mucha emoción", ha concluido.
