La situación vivida en Austria con las penalizaciones de los motores (entre Fernando Alonso y Jenson Button llegaron a sumar 50 posiciones) ha levantado las críticas de aficionados, equipos y antiguos pilotos que ven un castigo desmedido en que los pilotos sean penalizados, incluso, con tiempo si éstos no pueden cumplir todas las posiciones en parrilla.

"Es ridículo", dijo claramente Martin Brundle en Sky. "Acordamos en Malasia obviar la regla de los cuatro motores, pero ahora es una masacre", ha señalado Christian Horner. "No es una buena situación tener grandes constructores como Renault y Honda reprendidos publicamente, como están ahora mismo. Necesitamos dar una buena imagen", ha añadido.

Por su parte, Eric Boullier está de acuerdo con Horner en que alargar la congelación de los motores puede resultar un castigo muy severo para Honda y Renault.

"Creo que estamos yendo demasiado lejos con la limitación de desarrollo y, consecuentemente, con el sistema de penalizaciones", ha comentado el francés. "Las carreras son competición y en todas las competiciones debes poder mejorarte a ti mismo para ser mejor. Creo que deberíamos tener un desarrollo libre, fin de la historia. Sin debate, sin penalizaciones que lo hagan más complicado, por nosotros y, sobre todo, por los aficionados".

Monisha Kalterborn, sin embargo, cree que un desarrollo llibre sería ir demasiado lejos, pero sí cree que algo debe hacerse para ayudar a los constructores en apuros.

"Es algo serio, porque los aficionados no van a aceptar dos años más con este tipo de carreras", ha confesado.

"Esta Fórmula 1 se ha convertido en algo parecido a la hechicería cuando deberían ser carreras”, ha señalado Sergio Marchionne a Autosprint. "Nadie entiende nada si a los pilotos los retrasan 25 posiciones en la parrilla. Tenemos que ser más humildes, para intentar devolver el espectáculo al circuito", ha concluido.