Como cualquier ciclo económico de la historia, la Fórmula 1 también está en constante evolución, buscando la paridad entre los equipos y la competitividad, para ofrecer el mejor espectáculo posible a los aficionados. Jenson Button, piloto de Mclaren-Honda, está de acuerdo con estos cambios pero pide que se tenga en consideración a los pilotos, ya que son los que conducen los monoplazas y piensa que tienen algo que decir.

"Creo que tenemos mucho que decir, mucha opiniones sobre cómo hacer el deporte mejor para nosotros y para todos los demás que también lo ven", explica el compañero de Fernando Alonso.

Sin embargo cuando le preguntaron sobre si s está consultando a los pilotos sobre los cambios reglamentarios para 2017, el británico comentó que aún no, aunque lo harán. "Creo que se podrían hacer muchas cosas, con la experiencia que tenemos conduciendo monoplazas distintos y colocándonos a nosotros mismos en diferentes situaciones, podemos ayudar", asevera Button.

"Para mí el mejor desde el punto de vista del piloto fue 2004, teníamos motores V10, de 3 litros, 900 cv de potencia, llegaban a 21000 rpm y teníamos una guerra de neumáticos. Fueron buenos tiempos, pero estos cambian. Los costes de todo lo que hacemos deben tenerse en cuenta y no sé realmente dónde nos coloca eso de cara al futuro", agrega.

En relación al tema de costes, una de las figuras que más ha hablado sobre ellos ha sido Monisha Kalterborn, jefa de Sauber, que está convencida de que no habría que hacer grandes cambios para reducir considerablemente los costes de producción, principalmente para los equipos medianos y pequeños, que tienen dificultades financieras.

"Las propuestas actuales, como agrandar los coches y los neumáticos, reduciendo el peso e incrementando la carga aerodinámica costarían 10 millones de euros adicionales", comenta la líder de los de Hinwil para la revista alemana Auto Motor und Sport.