Hasta el momento, la revolución de Sergio Marchionne en la escudería italiana va exactamente como había planificado. Tras el mal año 2014 con la nueva era del motor turbo V6, el presidente de Ferrari ha sido el artífice del cambio radical de los de Maranello. El italiano ha realizado una visita a Barcelona para ver las evoluciones de su equipo durante los test de esta semana, y comprobar de primera mano la competitividad del nuevo SF15-T.
"Lo que estamos viendo es el resultado de un equipo que ahora tiene los objetivos claros y los medios para alcanzarlos. Hará falta un poco de tiempo, e incluso en la primera carrera será difícil determinar lo que es capaz de hacer nuestro coche. Es posible que tengamos que esperar hasta la vuelta a Barcelona en el Gran Premio de España", señaló Marchionne para los periodistas italianos.
Sobre su relación con el nuevo y carismático jefe del equipo, Maurizio Arrivabene, sustituto de Marco Mattiacci, el presidente de la marca ha comentado que el conjunto tiene que tener confianza y continuar siendo humildes.
"Sí, tenemos que volver a establecer una relación de confianza y serenidad porque venimos de unos años poco afortunados. Tenemos todo por hacer y lo estamos construyendo con la humildad necesaria, porque no tenemos nada para ser arrogantes", continuó.
Sin embargo, los inicios del nuevo SF15-T, en su opinión, parecen muy prometedores en manos de Sebastian Vettel y Kimi Raikkonen. Incluso la actitud tan sonriente del finlandés es un gran paso adelante para Marchionne.
"Está dando los resultados que esperaban los ingenieros, pero tenemos que esperar a ver cómo se comporta en las carreras. Creo que era importante convencer a la Comisión de la Fórmula 1 para que los tokens puedan ser utilizados durante el transcurso de la temporada, de acuerdo con nuestra interpretación de las normas. Ha sido algo muy importante", comentaba el italiano.
Aún más importante era poner fin a un mal 2014 y dirigir a Ferrari por un camino unificado para el futuro. "El equipo está bien. Sabemos dónde estamos ahora, por lo que el siguiente paso es saber dónde están nuestros rivales", comentaba el Presidente.
CAMBIAR LAS REGLAS EL PRÓXIMO AÑO HABRÍA CREADO "ENORMES PROBLEMAS", SEGÚN MARCHIONNE
Además, Marchionne respalda la revolución técnica de la Fórmula 1 para 2017. A pesar de dar la imagen de que en Ferrari buscan un cambio rápido, ha resultado no ser así. El mismo día de la reunión de la Comisión del Gran Circo, los de Maranello publicaban imágenes de su radical busca de un nuevo concepto de coche para el futuro.
El presidente de Fiat Chrysler y Ferrari, ha dejado claro que no está a favor de los motores con 1.000 caballos de potencia y el cambio radical en los coches para el próximo año.
"No hay que confundir lo que se puede hacer este año para el 2016 y lo que puede hacerse para 2017. Los cambios del próximo año han creado grandes problemas en la gestión tanto para nosotros como para Mercedes. Decidimos abordar la cuestión de los neumáticos más grandes, los coches más anchos y los motores más potentes para 2017. La normativa actual seguirá siendo válida también el próximo año. Cambiar las reglas habría creado enormes problemas. Es fácil hacer cambios sobre el papel, pero hay que hacer que funcionen en la pista", señaló Marchionne.
Por último, el presidente de la marca ha explicado el uso de la insignia de Alfa Romeo en el Ferrari de este año y una posible asociación con la marca en el futuro. "He estado en el museo Ferrari y existe una gran cercanía en la historia con Alfa Romeo. Una asociación, tal vez ¿Quién sabe? Cualquier cosa es posible", concluyó Marchionne.
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