La Fórmula 1 sigue en vilo por el estado del piloto de Marussia, Jules Bianchi, y los comunicados médicos sobre la evolución del francés llegan con cuenta gotas. No obstante, el ex piloto del Gran Circo, Luciano Burti, ha tenido la oportunidad de hablar con el entorno del accidentado y confirma los peores pronósticos.

Después de más de dos semanas del terrorífico accidente, el compañero de Max Chilton sigue ingresado en el Hospital Universitario de Mie sin ningún síntoma de recuperación. De hecho, Burti asegura que las opciones son escasas.

"Hablando con gente que conoce su situación mejor, las posibilidades de recuperación son muy pequeñas", explicó a la radio brasileña Jovem Pan de Sao Paulo.

Recientemente se han podido conocer muchos detalles del accidente y sobre sus posibles causas. Sea cual sea el parte final de la investigación, que se conocerá finalmente en diciembre, todos sabemos que el hecho de que Bianchi llegara al hospital ya fue un milagro.

"Si sobrevive, parece que sus posibilidades de vivir sin secuelas también son muy pequeñas. Desafortunadamente, sabemos que las opciones de Bianchi no son muy buenas, pero es un milagro que no muriera al instante. Todo el mundo es consciente de ello", añadió Burti.

Finalmente, el actual comentarista de la televisión brasileña Globo se mostró muy afectado por ver cómo un piloto con todo el futuro por delante tiene que dar por finalizada su carrera por un accidente de estas características.

"Es muy triste oír todo esto, porque Bianchi es un piloto joven y talentoso. Lo veía siempre junto a Felipe Massa", lamentó.

El vicepresidente de la FIA asegura que Bianchi "sabía perfectamente" lo que hacía