Lewis Hamiltonsiguió los consejos de Pirelli para coronarse vencedor en el Gran Premio nocturno de Singapur. La marca milanesa pronosticó una estrategia de tres paradas y el piloto británico lo cumplió, incluso, con las vueltas adecuadas.

El piloto de Mercedes tuvo una clara ventaja debido al abandono prematuro de su compañero de equipo, Nico Rosberg, que le facilitó claramente la carrera. No obstante, la salida del coche de seguridad descolocó a todo el equipo de Brackley y no reaccionaron a tiempo, por lo que la carrera de Hamilton quedaba comprometida.

El inglés ya había parado dos veces y llevaba seis vueltas con el compuesto súper blando, por lo que tuvo que aguantar con dicho neumático un total de 26 vueltas, el mayor número de giros que ha rodado este compuesto durante todo el fin de semana. Aún así, pudo ampliar la ventaja lo suficiente con sus perseguidores para ponerse justo por detrás de Sebastian Vettel y pasarlo fácilmente con el nuevo juego de neumáticos blando.

El podio lo cerraron los dos pilotos de Red Bull, que hicieron una estrategia completamente diferente al ganador de la prueba con el objetivo de superar a Fernando Alonso. Tanto Sebastian Vettel como Daniel Ricciardo tampoco pararon en el período de coche de seguridad, pero en este caso llevaban neumáticos blandos porque se guardaban, a priori, el compuesto súper blando para la parte final de la carrera.

No obstante, la salida del coche de seguridad les ayudó y pudieron conservar este compuesto hasta el final de la carrera. Mientras, Alonso fue el primer piloto que paró cuando salió el coche de seguridad pero no pudo aprovechar la ventaja de los neumáticos nuevos ni al principio ni al final de la tanda.

El director de Pirelli Motorsport, Paul Hembery, confesó que le encantó la carrera con una gran diversidad de estrategias, lo que provocó una gran emoción en la lucha por la victoria. "De nuevo, hemos visto otra tensa y emocionante carrera, donde las diferentes estrategias han sido una parte crucial", dijo el británico.

Hembery recalcó la mínima diferencia que hubo entre el ganador de la carrera y sus perseguidores. "En las últimas vueltas del Gran Premio teníamos a Hamilton con los neumáticos blandos nuevos detrás de Vettel, que llevaba neumáticos blandos usados, por lo que pudo adelantarlo para ganar la carrera. Antes de eso, Hamilton había sacado una diferencia de casi medio minuto con el súper blando después de la salida del coche de seguridad. A pesar de que ha habido diferentes estrategias, ha acabado muy ajustado", concluyó.