Giancarlo Minardi ha vuelto a criticar a la Fórmula 1. Esta vez, el culpable ha sido el artículo 36.1 del reglamento deportivo, en el que se estipula que si un piloto no consigue alcanzar el 107% del tiempo más rápido (en cada sesión) de la calificación, este pierde el derecho a participar en la carrera del domingo, como ya le ocurrió a la escudería española HRT en el GP de Australia 2011 y 2012.

"No quiero hurgar el dedo en la herida, pero hay muchos puntos que no están claros, especialmente por lo que vimos en Bahréin la semana pasada. A parte de los problemas de fiabilidad, no se ha tenido en cuenta el corte del 107%. Si tomamos las clasificaciones de los cuatro días, vemos que sólo 14 pilotos se habrían clasificado", analizó el italiano.

"El corte del 107% también debería ser reconsiderado", explicaba Minardi. "Es cierto que existen excepciones, como ya hemos visto en los últimos años, cuando ha bastado con marcar un tiempo dentro del 107% en los entrenamientos libres para clasificarse. Pienso que es necesario revisar la norma, sin necesidad de suprimirla. La norma debería ser revisada, no descartada, porque para los comisarios sería complicado lidiar con coches que tuvieran grandes diferencias técnicas", matizaba el de Faenza.

"Ahora mismo los coches tienen dificultades para dar varias vueltas seguidas, a menos que desconecten los sistemas de recuperación de energía, pero entonces corren menos. Este año usar el KERS representará una ventaja de cuatro segundos por vuelta, el equivalente a 90 caballos", confirmó,

Además de los problemas que la Fórmula 1 pueda experimentar con la regla del 107%, Giancarlo también hizo hincapié en que –con las nuevas regulaciones- los comisarios de pista no podrán sacar a un coche averiado de la pista hasta que se desconecte la alarma del nuevo sistema ERS:

"Eso podría hacer que las intervenciones fueran mucho más largas y, por tanto, el coche de seguridad saldrá más a menudo", concluyó Minardi.

Curiosamente, la escudería Minardi (que compitió desde 1985 hasta 2005) sufrió hasta 344 abandonos (sumando a ambos pilotos) en los 340 GPs que disputó, entre ellos 9 de Fernando Alonso.