La carrera de Michael Schumacher en el Gran Premio de Canadá finalizó antes de lo previsto a causa de un problema hidráulico que dejó su DRS abierto. Tras cinco abandonos en siete carreras, algunas son las voces en el paddock que han señalado que el heptacampeón está teniendo demasiada mala suerte en una misma temporada.

A pesar de los resultados, el Kaiser asegura seguir creyendo en Mercedes. "Por supuesto, el resultado de Montreal fue decepcionante, pero nunca perderé mi coraje o mi fe en el equipo. Sigo creyendo que conseguiremos buenos resultados juntos, con Mercedes. No hay razón para culpar a nadie, circunstancias desafortunadas como ésta son parte del deporte de motor", afirmaba Schumacher.

A pesar de la decepción por abandonar en Montreal, el piloto de Mercedes ha señalado que la retirada forzada fue mentalmente peor para los mecánicos de las flechas plateadas. "Estoy seguro de que es incluso más duro para los chicos del equipo. Es por eso que me senté con mis ingenieros justo después de mi abandono para debatir cómo deberíamos afrontar la próxima carrera y estar seguros de que estaremos en pleno contacto en los días previos", recalcaba el heptacampeón.

Aunque la temporada de Schumacher no está siendo la esperada y tan sólo ha podido sumar dos puntos en las siete carreras disputadas, el Kaiser no pierde el sentido del humor. "Quizá la única pequeña ventaja de la situación de Canadá fue que no encontré tráfico de camino al aeropuerto. Ya tenía pensado volar lo antes posible para estar con mi familia, así que al menos pude salir del circuito justo antes de que la bandera a cuadros ondeara", concluía el alemán.