Michael Schumacherconsiguió el tiempo más rápido de la Q3 en el Gran Premio de Mónaco, a pesar de que salió desde la sexta posición de la parrilla debido a una penalización de cinco puestos que arrastraba desde España. Sin embargo, marcar la vuelta rápida de la sesión sirvió para volver a ver el pilotaje y talento que le ha convertido en heptacampeón de la Fórmula 1.

No obstante, desde que regresó a la máxima categoría muchos han sido críticos con su actuación en los últimos años al volante del Mercedes. En palabras de Jenson Button, nadie debe subestimar al Kaiser. "Desde que Michael volvió a la Fórmula 1 ha recibido muchas críticas. Creo que hemos olvidado lo que ha conseguido en el pasado, si quieres llamarlo así. A veces pasa tiempo hasta que te encuentras cómodo en el monoplaza y con la gente con la que tienes que trabajar", señalaba el campeón de 2009

El piloto de McLaren afirma la actuación del sábado en Montecarlo otorgó confianza y felicidad a Schumacher, además de rabia por tener que retroceder cinco puestos en la parrilla. "Creo que hizo una gran vuelta, no cometió ningún error y obviamente se lo merecía. Estoy seguro de que estaba muy contento cuando se bajó del monoplaza, pero también decepcionado por tener que salir desde la sexta plaza en un lugar como Mónaco", afirmaba Button.

El jefe de equipo de McLaren, Martin Whitmarsh, también asegura que Schumacher mostró un buen rendimiento en la sesión de clasificación en Mónaco. Sin embargo, señala que seguirán queriendo superarle en pista. "Michael ha sido un gran piloto. Nos gusta superarle y que no sea él quién nos supere a nosotros. No vamos a ponernos melancólicos. Tienes que dar crédito adonde verdaderamente haya crédito", comentaba Whitmarsh.

"Pero en Mónaco hizo un gran trabajo en su vuelta rápida. Estuviera penalizado o no, queremos superarle el próximo día", añadía el jefe de equipo de McLaren.

En su tercer año como piloto de Mercedes, el mejor resultado de Schumacher ha sido la cuarta posición y el primer puesto de la Q3 en Mónaco. En un año en el que su monoplaza parece haber llegado al ritmo de las escuderías punteras, el Kaiser aguarda su oportunidad para demostrar que su regreso a la Fórmula 1 no ha sido en vano.