A la parrilla de salida de 2012 tan sólo le quedan dos volantes disponibles, uno en HRT y el otro en Williams. A falta de un mes para iniciarse la pretemporada en el Circuito de Jerez, son muchos los pilotos que, detrás de las bambalinas, esperan la llamada de una de las escuderías del mundial para ocupar un puesto en la Fórmula 1 del próximo año. Y uno de estos pilotos expectantes es Jules Bianchi.

El francés, tercer clasificado en la GP2 Series de 2011, ha afirmado sentirse confiado en pilotar uno de los monoplazas de la competición la próximo temporada. Aunque ha asegurado que será complicado ocupar un puesto de piloto oficial, Jules Bianchi opta por ser reserva y tener opciones de pasar a titular en 2013. "Trataré de jugar un rol importante en la Fórmula 1 este año para acumular la máxima información y experiencia que pueda y conseguir un volante en 2013", comentaba el piloto de la Ferrari Drivers Academy a la radio francesa RCM.

"El objetivo es encontrar un equipo que me permita hacer el máximo kilometraje y, al mismo tiempo, poder seguir con Ferrari. Ya me siento preparado para la F1 de 2012, pero debo quedarme fuera del terreno de juego. Es un poco duro pero así es la Fórmula 1. No me daré por vencido y trataré de estar en 2013", añadía el piloto de Niza.

Los planes marcados por el piloto francés son similares al reciente año vivido por Nico Hülkenberg. Tras ganar la GP2 Series, el alemán debutó en la máxima competición en 2010 de la mano de Williams. Sin embargo, la temporada pasada la vivió como piloto reserva de Sahara Force India, puesto que aprovechó para ganar experiencia y conseguir ser titular en 2012.

Con el ejemplo de Hülkenberg, Bianchi confía en ser piloto oficial en 2013. A pesar de los constantes rumores que le sitúan como sustituto de Kamui Kobayashi en Sauber, el francés apuesta por un debut más modesto en la Fórmula 1.