Tom Kristensen ha sido comisario-piloto ya en más de una ocasión, y cree que esta figura es de suma importancia. El piloto danés fue el consejero del 'trío arbitral' en los GP de Australia y Alemania, y al parecer sus indicaciones no sólo han dejado en la FIA un buen sabor de boca, sino que la experiencia ha sido muy positiva para el ocho veces ganador de las 24 horas de Le Mans.


"Fue bueno, sin duda una buena experiencia", dijo Kristensen a GPUpdate. "Creo que es una muy buena idea y al final creo que significa que la competición mejora, es un acercamiento más profesional, con mucho respeto entre unos y otros. Tener un piloto allí, pensando de otro modo, creo que es muy importante en ciertas situaciones de carrera".

El mecanismo se pone en marcha cuando Charlie Whiting determina que tiene dudas ante algún tipo de incidente y ha de seguir atento al resto de la carrera. En ese momento el trío de comisarios se pone en marcha para analizar más detenidamente la acción dudosa en la que el piloto aporta su análisis pero no decide las determinaciones. Una vez que se toma una decisión, se le devuelve a Charlie Whiting, que suele aplicar -o no- la sanción.

Kristensen deja caer detalles interesantes: "básicamente jugamos con los que Charlie [Whiting] nos da, aunque a veces necesitamos ver algo más (en referencia a planos de TV añadidos, vueltas anteriores, etc). Otras veces es muy fácil decidir. Para Charlie es muy importante que tomemos todas las decisiones antes de que caiga la bandera a cuadros, así que tenemos prioridad en este aspecto".

El danés cree que es vital la presencia de un piloto a la hora de la toma de decisiones de este tipo, "teniendo experiencia en carrera aumenta tu calidad; es más, diría que es necesario que al menos alguno [de los comisarios] tenga experiencia en carrera".